Los obreros de Notre-Dame violaron la prohibición de fumar en los andamios

La empresa que estaba realizando las labores de reforma en la catedral de Notre-Dame ha reconocido que algunos obreros se saltaron la prohibición de fumar en los andamios, pero ha descartado rotundamente que esta haya sido la causa del incendio que dañó el lunes pasado buena parte del emblemático edificio gótico parisino.

“Hay compañeros que de vez en cuando se han saltado esta prohibición y lo lamentamos”, ha afirmado a la agencia AFP Marc Eskenazi, portavoz de la empresa Le Bras Frères. “En ningún caso un cigarro mal apagado pudo ser la causa del incendio. Cualquier persona que haya intentado alguna vez prender el fuego de una chimenea sabe que no pasa gran cosa cuando se lanza una colilla sobre un tronco de roble”, ha añadido.

Este miércoles, un semanario satírico, Le Canard Enchaîné, ha publicado que la policía encontró colillas cerca de los andamios. Era “un poco complicado bajar porque llevaba tiempo”, ha señalado Eskenazi.

Sobre la pista de que el fuego partiera de los motores eléctricos de los ascensores colocados para montar los andamios, Eskenazi ha indicado que no se ha identificado “ningún problema” en éstos. “De todas maneras, están lejos de la aguja y según lo que se ha establecido, el incendio arrancó dentro del edificio”. La investigación apunta a un cortocircuito como la causa principal del fuego.

Este martes se anunció que se va a desplegar una gran lona sobre la catedral para proteger el edificio de las lluvias que caerán en los próximos días. “La mayor prioridad es proteger la catedral de la lluvia que va a llegar”, explicó el arquitecto jefe de Notre Dame, Philippe Villeneuve en una entrevista al canal BFMTV.

Se trata de evitar que sufran todavía más las bóvedas, que han quedado al descubierto desde el incendio de la cubierta el lunes de la semana pasada, tras haberse empapado del agua que lanzaron los bomberos durante las labores de extinción.