Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

La policía detiene durante unas horas a Greta Thunberg en una protesta ecologista en Alemania

La policía se lleva a la activista climática Greta Thunberg de una protesta en Alemania.

elDiario.es / Agencias

9

La activista Greta Thunberg fue detenida brevemente este martes junto a un grupo de activistas que protestaban contra el desalojo del pueblo minero de Luetzerath, Alemania. Thunberg fue llevada en volandas por tres policías a un lugar alejado del borde de la mina y luego escoltada hacia los furgones policiales.

“Ayer formé parte de un grupo que protestaba pacíficamente contra la ampliación de una mina de carbón en Alemania. La policía nos acorraló y nos detuvo, pero nos dejaron marchar esa misma tarde”, informó Thunberg este miércoles en su Twitter. “La protección del clima no es un delito”, añadió.

La policía justificó ese desalojo debido a que permanecer en ese lugar era peligroso, por lo que se procedió a llevarse una a una, en volandas, a las personas que participaban en la acción de protesta. Fueron transportadas fuera de esa zona de peligro en un autocar policial, en el que quedaron retenidas temporalmente mientras se les tomaban los datos e identificación.

“Se cortó el paso a Greta Thunberg y ha sido trasladada junto a este grupo fuera de la zona inminente de peligro para identificarla”, dijo este martes un portavoz de la policía de Aachen a la agencia Reuters. La activista se unió el viernes a las protestas. “No hay razón para mantenerlos durante días. Puede llevar horas o pueden salir inmediatamente”.

Un testigo señaló a la agencia de noticias que Greta estaba sentada en un vehículo de la policía tras ser retenida. “Vamos a utilizar la fuerza para llevarles al control de identidad, por favor, cooperen”, dijo un policía al grupo de manifestantes, según recoge Reuters.

La policía alemana comenzó la semana pasada el desalojo de la localidad de Lützerath (al oeste del país) para incrementar la explotación de lignito en la mina Garzweiler II, ante la resistencia de activistas medioambientales.

El consorcio energético RWE había anunciado previamente que las obras comenzarán en Lützerath a lo largo del martes y que una de las primeras medidas iba a ser levantar una valla de construcción de aproximadamente un kilómetro y medio para asegurar el recinto.

La semana pasada hubo protestas, pero el pueblo minero quedó acordonado durante el fin de semana, tras demolerse las casas, granjas y construcciones de madera en que durante varios días centenares de activistas se resistieron al desalojo, en medio de un fuerte despliegue policial.

El sábado, una amplia alianza de organizaciones contrarias a la altamente contaminante extracción de lignito y a la demolición de Lützerath celebró una marcha en la que participó Thunberg. La activista se dirigió entonces a los cerca de 6.000 manifestantes que marcharon hacia Luetzerath y calificó la ampliación de la mina de “traición a las generaciones presentes y futuras”. “Alemania es uno de los mayores contaminadores del mundo y tiene que rendir cuentas”, dijo.

El operativo se dio por finalizado el lunes, tras salir voluntariamente de un túnel los dos últimos activistas que se habían atrincherado en un reducto de la población.

Sin embargo, este martes hubo nuevas acciones en otros puntos de la región, incluida la capital del “Land” de Renania del Norte-Westfalia, Düsseldorf, mientras que un grupo de hasta setenta activistas protagonizaba otra protesta en la mina de Gatzweiler, entre ellos Thunberg.

Desde el gobierno del canciller Olaf Scholz se condenaron este lunes los actos de resistencia mantenidos el fin de semana, que según el Ministerio del Interior llegaron a ser violentos y obstaculizaron la labor de los equipos sanitarios.

Por parte de los movimientos medioambientales se ha asegurado, por otro lado, que la policía actuó con una contundencia desproporcionada, incluidos golpes de porras en la cabeza contra los activistas.

Aunque el plan del Gobierno alemán es que el abandono del carbón en Renania del Norte-Westfalia se produzca ya en 2030, según el acuerdo suscrito el año pasado con la energética RWE, operadora de la mina de Garzweiler, a corto plazo está previsto incrementar la extracción de carbón ante la crisis energética derivada de la invasión rusa de Ucrania.

La mayoría de los habitantes de Lützerath ya habían abandonado el pueblo ante la intención de RWE de ampliar la explotación de la mina Garzweiler II.

La cuestión es compleja para Los Verdes, socios de gobierno en el tripartito entre socialdemócratas, ecologistas y liberales de Scholz, así como en la coalición regional que lidera en ese “Land” la Unión Cristianodemócrata (CDU). 

Etiquetas
stats