Agresiones a trabajadores y falta de personal en el centro de discapacitados de Fuenmayor
Según denuncia el Sindicato de Trabajadores de la Administración Riojana (STAR), hace ya algún tiempo que la situación en el Centro de atención a personas con discapacidad psíquica Santa Lucía de Fuenmayor, resulta insostenible. Las agresiones a los trabajadores se han convertido ya en parte del trabajo y la falta de personal empieza a pasar factura, tanto en el servicio que se presta, como en el propio estado físico y emocional del personal del centro.
Al parecer, desde la entrada en vigor de una nueva normativa referente a la entrada de los residentes en este centro, las necesidades podrían haber cambiado, al tratarse en ocasiones de patologías psiquiátricas más allá de la discapacidad del paciente. Lo cierto es que, en los últimos tiempos, se han producido continuas agresiones a los trabajadores.
El sindicato quiere dejar claro que el personal conoce muy bien su trabajo, y las posibles “cargas de agresividad” que a veces conlleva. Sin embargo, esa violencia ocasional de algunos pacientes, parece haber ido ahora más allá con los nuevos ingresos. Hasta tal punto que los trabajadores dicen sentirse “desbordados”, padeciendo una situación de ansiedad y estrés que, no solo afecta a su salud sino tamibén al servicio prestado. Denuncian además que no existe ningún protocolo de actuación ante situaciones de este tipo.
Pero la cosa no queda ahí. STAR asegura también que no se están cubriendo varias bajas por enfermedad, ni se sustituyen algunas reducciones de jornada, dejando a la plantilla en “mínimos históricos”. Se ha solicitado ya al Gobierno regional que aumente a dos Auxiliares de Enfermería el turno de noche en todos los módulos para controlar mejor las situaciones de peligro. Sin embargo, hasta ahora parece que han hecho oídos sordos. Incluso asegura el sindicato que no se están cumpliendo los objetivos mínimos que se fijaron cuando se abrió el centro en materia de personal.
Quieren destacar que, a pesar de todo, el esfuerzo y la profesionalidad de los trabajadores está haciendo que el centro salga adelante con una altísima calidad de los servicios prestados. Pero se preguntan en cambio como pueden ser tan buenos los resultados de satisfacción de la encuesta de la que hace gala la Consejería “ya que la sociedad es plenamente consciente del deterioro y los recortes que están sufriendo los servicios sociales en La Rioja”. Se preguntan por tanto si esas respuestas no se habrán “cocinado” en los propios despachos de la administración regional.
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