Aumentan un 14,3% las llamadas al Teléfono del Menor

El Teléfono del Menor recibió el año pasado 22.638 llamadas, lo que supone un aumento del 14,3 por ciento respecto a 2013 (19.799) y un incremento exponencial respecto a sus primeros años: 3.351 llamadas en 2011 y 6.146, en 2012.

El aumento en el número de llamadas, según ha señaldo el consejero José Ignacio Nieto, que evidencian “un mayor conocimiento por parte de los destinatarios de este servicio y contribuyen a su consolidación como un referente menores y jóvenes”. Cabe recordar que La Rioja se adhirió a este servicio en noviembre de 2010.

Nieto ha hecho un llamamiento a adolescentes y jóvenes para que “vean este recurso como una mano tendida, una mano amiga en la que apoyarse cuando tengan cualquier problema, porque en el Teléfono del Menor van a encontrar personas preparadas para ayudarles y orientarles en cualquier asunto que les preocupe”. Y todo ello, “con la mayor confidencialidad, sin dejar ningún tipo de rastro”.

El Teléfono del Menor permite a los menores y adolescentes, una edad en la que se presentan claros problemas de comunicación intergeneracional, compartir o contar cualquier problema que les preocupe de forma confidencial y gratuita, lo que permite que salgan a la luz situaciones de riesgo, desamparo, soledad o aislamiento de menores hasta entonces desconocidas. Está gestionado por la Fundación ANAR (Ayudas a Niños y Adolescentes en Riesgo) y cuenta con dos números: 900 20 20 10 (22.011 llamadas accedieron a través de esta línea, el 99,8 por ciento) y 116111 (contabilizó 581 llamadas, el 2,6 por ciento).

Del número global de llamadas atendidas el pasado año, el 99,8 por ciento (22.592 fueron realizadas por menores de edad), mientras que sólo 46 (0,2 por ciento) las llevaron a cabo adultos. Asimismo, es importante señalar que las llamadas pueden dividirse en dos grandes grupos: llamadas de orientación, en las que es preciso realizar una labor de contención emocional o que requieren de una orientación simple y de una atención más genérica; y llamadas de orientación especial, que requieren un asesoramiento más específico y, en muchos casos, son derivadas al recurso externo más adecuado en cada caso (Servicios de Protección del Menor, Centros de Servicios Sociales, Fiscalía, abogados, etc.). La mayor de llamadas (22.530) pertenece al primer grupo; mientras que se registraron un total de 108 llamadas de orientación especial.

Nieto ha revelado que la violencia ejercida hacia menores, en cualquiera de sus formas (bullying, maltrato físico y psicológico, agresiones, abandono, abuso sexual, violencia de género, ciberacoso, etc.) representan el principal motivo de consulta hasta llegar a un 27 por ciento en el caso de niños y adolescentes (cinco puntos más que el año pasado) y al 34,5 por ciento en el de las registradas en la Línea del Adulto y la Familia.

Maltrato

En cuanto al maltrato físico y psicológico, este factor se halla presente en el 12,4 por ciento de las llamadas realizadas por niños y adolescentes y en el 21,8 por ciento de las consultas realizadas por adultos.

Asimismo, las llamadas 'dificultades de relación' suelen constituir las razones por las que más menores deciden pedir ayuda (situaciones conflictivas de comunicación entre el menor y las personas cercanas de su entorno; nuevas parejas de los padres, etc.) En 2014, el 18,8 por ciento de las llamadas registradas en la Línea del Niño y Adolescente giraban en este sentido; mientras que el porcentaje se reducía al 8,7 por ciento en el caso de la Línea del Adulto y la Familia.

Dentro de las 'dificultades de relación' destacan los problemas sentimentales (4,2 por ciento de consultas por la Línea del Niño y del Adolescente; problemas de sexualidad, en su mayor parte relacionado con la detección y prevención de embarazos, con el 18,8 por ciento de consultas en la línea de menores y el 4,3 por ciento en la de adultos; problemas en el colegio -rendimiento, absentismo, dificultades con profesores o compañeros-, que representan el 2,1 por ciento de llamadas de menores y el 4,3 por ciento de adultos).

En tercer lugar se sitúan los problemas psicológicos, que engloba, entre otros: ansiedad, soledad, intentos suicidas, tristeza, miedos, trastornos psiquiátricos, baja autoestima, trastornos de la alimentación Este tipo de consultas ocasionaron en 2014 un 14,6 por ciento de las llamadas de menores y un 13,1 por ciento de las realizadas por adultos.

En cuarto y último lugar, hay que destacar los problemas jurídicos de diversa índole (derechos y deberes de la infancia, menores infractores, procesos de separación, custodia, régimen de visitas, etc. aparecen en un porcentaje del 17,5 por ciento en la línea del Adulto y la Familia, mientras que solo representan el 6,2 por ciento en el caso de los menores.

Perfil de los usuarios

El grupo de 12-17 años concentra el 89,6 de las llamadas, mientras que la edad infantil (0-7 años) representa el 34,8 por ciento de los casos atendidos en la Línea del Adulto y la Familia. En cuanto al sexo, y siguiendo la tónica de años anteriores, el 75 por ciento de usuarios de la Línea del Niño y del Adolescente son mujeres, frente al 25 por ciento restante de varones.

Como dato curioso puede señalarse que los meses con mayor actividad fueron julio (5.206 llamadas), noviembre (3.267) agosto (3.071), mientras que los que menor actividad tuvieron fueron febrero (495 llamadas) y marzo (696 llamadas). La media mensual es de 1.886 llamadas.

El teléfono es atendido por un equipo profesional formado por psicólogos, psiquiatras o psicopedagogos, trabajadores sociales y abogados, que trabajan en una oficina centralizada que presta servicio a toda España y a cuya financiación el Gobierno de La Rioja aporta 15.300 euros cada año. Este equipo trabaja en coordinación con los servicios sociales, sanitarios, judiciales, de educación y de seguridad de cada comunidad, a los que deriva llamadas siempre que sea necesario.

En 2014 fue necesario derivar 72 casos (se trata en su mayoría de derivaciones a servicios sanitarios, inspección de educación o servicios sociales y servicios de orientación jurídica). En otras ocasiones, la gravedad de la situación requiere que los profesionales no deriven la llamada sino que directamente sean ellos mismos los que pongan en conocimiento de las autoridades competentes los casos concretos. Esta situación se ha dado en La Rioja en 2 ocasiones: el embarazo de una menor de 15 años y el abandono de dos niños (uno de seis años y su hermano de pocos meses de edad).

La Fundación ANAR (Ayuda a Niños y Adolescentes en Riesgo) es una organización sin ánimo de lucro. Sus orígenes se remontan a 1970 y, desde entonces, se dedica en el marco de la Convención de los Derechos del Niño de Naciones Unidas, a la promoción y defensa de los derechos de los niños y adolescentes en situación de riesgo y desamparo, mediante el desarrollo de proyectos tanto en España como en Latinoamérica. La Fundación lleva trabajando desde sus inicios con los Hogares ANAR, casas de acogida para niños y adolescentes carentes de un ambiente familiar adecuado.

El objetivo principal del Teléfono ANAR es facilitar a los niños y adolescentes un espacio seguro, confidencial, en el que se sientan escuchados y respetados, y en el que puedan expresar libremente aquello que les ocurre para intentar buscar alternativas a sus problemas conjuntamente con ellos.