Calahorra, ciudad de la música

El presidente de la Fundación García Fajer, Anselmo Fernández, ha afirmado que 2008 será un punto y aparte en la historia de esta entidad, en la que comenzará a consolidar su prestigio nacional e internacional con el inicio de nuevos proyectos como la creación de una pequeña ciudad de la música Calahorra.

En un rueda de prensa en Logroño junto al director artístico de la fundación, el polaco Michal Dmochowski, Fernández destacó que este proyecto pretende que el casco antiguo de Calahorra se llene de residencias para estudiantes y profesores, de tiendas de música y de talleres para fabricantes de instrumentos.

La idea, salvando las distancias, sería convertir a Calahorra en una localidad semejante a Salzburgo, para desarrollar un proyecto de turismo de calidad en el que las iglesias de San Francisco, la San Andrés y la propia catedral se convertirían en los escenarios musicales de este proyecto. Fernández insistió en que hay un compromiso de las administraciones para iniciar el próximo año una primera señalización alrededor de este proyecto, que se iría materializando a medida que fueran poniéndose en marcha las distintas cátedras que tiene previsto desarrollar la fundación.

Desde octubre de este año, la Fundación García Fajer tiene en funcionamiento la cátedra de excelencia de violonchelo, a la que un plazo de cinco años se añadirán las de violín, viola, contrabajo y guitarra. En este cátedra cursan sus estudios desde el pasado 1 de octubre cinco alumnos de 12 a 25 años de Corea del Sur, República Checa y España bajo la tutela del titular de la misma, el maestro polaco Kazimierz Michalik. Además de los otros violonchelistas que componen el claustro de profesores, los estudiantes reciben una o dos veces al mes clases magistrales por parte de distintos profesionales internacionales que se acercan hasta Calahorra.

El director artístico de la fundación destacó que esta iniciativa no pretende competir con ningún conservatorio ni escuela de música, ya que su concepto se basa en una constata práctica con el instrumento elegido, que puede llegar a ser de entre ocho y diez horas diarias. “En los conservatorios hay asignaturas como solfeo, armonía o estructura musical que detraen mucho tiempo de la práctica musical. Nosotros queremos que nuestros alumnos pasen el mayor tiempo posible con el instrumento”, afirmó Dmochowski, quien insistió también en que cada cátedra nunca tendrá más de ocho alumnos por curso.

La Fundación García Fajer, ubicada en el histórico edificio de la Casa Carramiñana, de Calahorra, nació hace dos años con el objetivo de recuperar la figura del compositor Francisco Javier García Fajer (Nalda, 1730, Zaragoza, 1809). Autor de más de cuatrocientas obras musicales, repartidas por todo el mundo, la fundación ha trabajado desde entonces para ensalzar la figura del compositor, a la que vez que para poner a La Rioja en panorama musical mundial con la generación de una cantera de músicos propios.

“La Rioja debe ser conocida por algo más que por su vino y la lengua”,

recalcó Fernández, quien insistió en que para 2008 la fundación ha programado unos cientos veinte conciertos por toda la Comunidad, con lo que superará los casi 44 que ha organizado en estos dos últimos años.