Con un pie en la final de la Copa

Naturhouse La Rioja (13+17): Lorger (p), Parra (2), Juárez (4, 3 penalti), Romero (5), Vigo (3), López (6), Amargant (1), Aguinagalde (ps), Velasco (2), Tioumentsev (7), Duricin y Silva.

TBV. Lemgo (11+14): Martin (p), Ilyes (2), Preiss (3), Bechtloff (3), Glandorf (2), Kehrmann (6), Kubes, Lichtlein (ps), Kraus (5, 3p), Schemetz, Mocsai (3), Strobel (1), Hermann y Svavarsson.

Parciales: 2-4, 5-5, 8-7, 10-9, 11-11, 13-11 (descanso), 16-15, 20-17, 22-19, 23-21, 27-23 y 30-25 (final). Árbitros: Opava y Valek (República Checa). Excluyeron por dos minutos a los visitantes Kubes (en dos ocasiones) y Preiss. Incidencias: Más de 3.200 espectadores en el Palacio de los Deportes de La Rioja para presenciar el partido de ida de semifinales de la Copa EHF.

NATURHOUSE LA RIOJA - LEMGO, 30-25

A veces los sueños, se hacen realidad. Así lo demostró el equipo de Jota González, el Naturhouse La Rioja, al vencer al Lemgo, un equipo que le quintuplica en presupuesto. Era el primer partido de semifinales de la Copa EHF. A Jota, según había anunciado en días anteriores, le bastaba con ganar. Y así fue.

Una sólida defensa 5-1 con Parra o Velasco adelantados, un gran Lorger, como ya es habitual, bajo los palos, y un ataque capitaneado por jugadores de poca envergadura pero con movimientos rápidos y sorprendentes fueron los ingredientes de un triunfo holgado ante uno de los equipos más grandes de Europa.

A pesar de que los germanos comenzaron por delante en el marcador (0-2), los riojanos lucharon por evitar su avance. Romero fue quien marcó los tres primeros goles para los riojanos, lo que sería una premonición de la gran labor que desempeñaría más tarde. Consiguió desbaratar la defensa del Lemgo en beneficio de otros compañeros y colaboró de forma activa en la victoria.

La primera parte transcurrió muy igualada. Tras el empate a 5, llegó otro a seis, ocho, nueve, diez, once, etcétera. El Naturhouse se mostraba como un equipo sólido que se creció ante un grande. Llegó el descanso con 13-11 en el marcador.

Los primeros minutos de la segunda parte el Lemgo consiguió igualar de nuevo el marcador, pero tras un cuarto de hora, el ataque efectivo de los riojanos y la escasa pérdida de balones sentenció el partido. Unas 2.700 personas ofreció un emotivo aplauso a su equipo desde las gradas. A veces ocurren cosas que probablemente no se repitan en mucho tiempo. Y es que la conjunción de un entrendor como Jota Gonzalez y un equipo formado por jugadores de tal calidad deportiva y humana, con un presupuesto tan humilde, es difícil que se repita muchas veces a lo largo de una única vida del aficionado.

“No se puede pedir más”

Jota Gonzalez estaba contento al término del encuentro. “Es una gran victoria. No sé si será suficiente para la vuelta en Alemania, pero no se puede pedir más”, señaló. El técnico vallisoletano se mostró consciente del acierto en la defensa. “El 5-1 funciona ante equipos europeos”, y es que es un sistema que se va consolidando para los riojanos, y lo ejecutos de forma rentable. También reconoció que le había sorprendido la defensa germana. “Me ha sorprendido la defensa 6-0, no han salido”. Pero el sistema de los riojanos también cambió a lo largo del partido.

Ahora la mirada está puesta en el partido del miércoles ante el Ademar en León. De momento, los riojanos ocupan el quinto puesto de la clasificación con un punto más que el CAI Aragón.