Condenados a muerte

Un tribunal ha condenado ha muerte este jueves a once iraquíes por planificar y llevar a cabo los atentados con camión bomba que el pasado mes de agosto causaron 95 muertos y más de mil heridos en Bagdad.

“Un tribunal penal impuso este jueves la pena de muerte a once criminales que habían sido declarados culpables de cometer, planificar y financiar los ataques con bomba contra los Ministerios de Hacienda y Asuntos Exteriores”, dos de los lugares más protegidos del país, declaró un portavoz del Consejo Supremo Judicial de Iraq, Abdul Sattar al Birqdar.

El pasado mes de diciembre, otro tribunal del país condenó a tres hombres a la pena capital por el atentado con bomba que el pasado mes de junio dejó al menos 88 víctimas mortales, cuando un suicida hizo estallar un camión cargado de explosivos mientras los fieles abandonaban una mezquita chií el pasado 20 de junio en Taza, cerca de Kirkuk, al norte de Bagdad. Entre las víctimas había mujeres y niños.

“El tribunal penal de Rusafa condenó a tres personas a muerte en la horca por la explosión en Taza en junio”, indicó el portavoz, que precisó que los tres condenados, que pueden apelar la sentencia, perpetraron el ataque, si bien no especificó cuál es su implicación en concreto con el suicida. En un comunicado, el Centro Nacional de Prensa indicó que los sospechosos confesaron que participaron en el atentado.

Amnistía Internacional (AI) advirtió con motivo de esta condena de que, en la actualidad, hay más de 900 personas condenadas a muerte en Iraq, incluidas 17 mujeres, que han agotado ya todas las vías de apelación y que, por tanto, podrían ser ejecutadas “en cualquier momento”. En este sentido, expresó su temor de que el Gobierno ordene las ejecuciones antes de las elecciones generales del próximo año para dar una “una imagen de firmeza contra la delincuencia”.