CSIF denunciará a Luis Cacho por vulneración del derecho a la negociación sindical

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha anunciado que llevará a los tribunales al Consejero de Educación por “vulnerar” su “derecho fundamental a la negociación sindical”, dado que le acusa de haberle “excluido de las negociaciones del Plan de Contingencia”.

En nota de prensa, ha considerado que el Plan de Contingencia para el próximo curso escolar “empeora sustancialmente las condiciones de trabajo de los docentes riojanos, aumentando su jornada laboral y responsabilidades de índole sanitario que sobrepasan sus competencias”.

CSIF critica que no se le haya “invitado a ninguna reunión para tratar este documento” y añade que “ahora también es cuestionado por las tres organizaciones sindicales afines que, hasta ahora, han avalado las decisiones del Consejero de Educación estampando su firma en el tan cacareado pacto por la Pacto Social por la Reconstrucción Educativa, el pasado 18 de mayo”.

CSIF entiende que un documento de tanta importancia y transcendencia para la comunidad educativa y especialmente para los docentes, debería haberse negociado en la Mesa Sectorial de Educación.

Ha considerado que “se ha aprovechado la exclusión de CSIF para presentar un documento fuera de plazo, insuficiente y que empeora sustancialmente las condiciones de trabajo del profesorado”.

También ha manifestado su “perplejidad ante la actitud del consejero por haber presentado dicho Plan solamente a las tres sindicatos que ahora desaprueban públicamente un documento que sólo ellos conocían antes que el resto de los sindicatos de educación”.

Ha añadido que, “si durante el confinamiento los docentes ya sufrieron el exceso de trabajo, la ansiedad y la ingente cantidad de burocracia, ahora se pretende ir más lejos con la presentación de los tres planes negociados con sus sindicatos afines”.

Ha indicado que sólo se da tres días de plazo a los equipos directivos para que preparen el plan de contingencia para el centro; “se aumentan las horas de trabajo, que pasan de dieciocho a 21 horas, y se empeora sustancialmente las condiciones de trabajo del profesorado”.

Junto a esto, ha creído que “no da garantías suficientes para la protección sanitaria, ni del profesorado, ni de los alumnos”.