El Ejército marfileño sitia a Ouattara
La tensión en Costa de Marfil sigue aumentando tras la celebración de la segunda vuelta electoral, en los que son considerados unos comicios históricos para el país africano. La no aceptación por parte del actual presidente, Laurent Gbagbo, de los resultados oficiales que dan la victoria a su contrincante en las urnas, Alassane Ouattara, pone en peligro la estabilidad del país.
Muestra de ello es la acción emprendida por el Ejército marfileño, fiel a Gbagbo, quien ha rodeado el hotel del centro de Abiyán donde se aloja Ouattara, lo que ha propiciado el despliegue de las tropas de Naciones Unidas en torno al edificio para garantizar la seguridad del opositor.
El actual dirigente cuenta también con el apoyo de la Policía, que ha salido a las calles de la capital en camiones con ametralladoras para unirse a la protesta de los militares al considerar que Gbagbo es el vencedor legítimo de las elecciones.
Mientras, el contingente internacional y militantes de Fuerza Nueva (FN), un grupo rebelde que controla el norte del país y que permanece fiel a Ouattara, custodian el hotel para impedir que el presidente electo sea atacado, según informó la cadena británica BBC.
Ambos políticos han nombrado un gobierno al considerarse vencedores de las elecciones del pasado 28 de noviembre , no obstante, solo Ouattara cuenta con el respaldo de la comunidad internacional y de la Comisión Electoral del país, según la cual obtuvo en 54,1 % de los votos frente al 45,9 % de Gbagbo.
Reacción internacional
Ante la continua tensión, los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea (UE) han acordado iniciar “sin dilación” empezar a preparar sanciones “dirigidas” contra aquellas personas que “obstaculizan el proceso de paz y la reconciliación nacional y, en particular, que pongan en peligro los resultados correctos del proceso electoral” en Costa de Marfil, en referencia clara a Gbagbo.
La Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Catherine Ashton, amenazó el pasado 6 de diciembre con impulsar sanciones si las partes en liza en Costa de Marfil no encontraban “una solución rápida” a la crisis política que vive el país tras las elecciones presidenciales.
En paralelo a la preparación de sanciones, los Veintisiete han instado a la jefa de la diplomacia europea a preparar, apoyada por la Comisión Europea, “propuestas” en “apoyo de las autoridades democráticamente electas”.
Los Veintisiete subrayan la “importancia” de las elecciones presidenciales del pasado 31 de octubre y 28 de noviembre para “la vuelta de la paz y la estabilidad en Costa de Marfil”, elogia la participación “en grandes números” en los comicios y subrayan que “resulta imperativo que la voluntad soberana expresada por el pueblo marfileño sea respetada”.
En este sentido, dejan claro que “la Unión Europea sólo considerará legítimo a aquellos líderes nacionales y locales que se han puesto ellos mismos a disposición de la autoridad del presidente democráticamente elegido” y trasladan su “total apoyo” a la ONU, que avaló la victoria de Ouattara y tiene “mandato” para certificar los resultados.
En cuanto a las medidas a tomar por los Veintisiete, la UE preparará “la congelación de visados y de activos” financieros en territorio europeo pero descarta aprobar sanciones para congelar fondos de ayuda al desarrollo para no dañar a la población local, según explicaron fuentes oficiales europeas a Europa Press.
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