El sector automovilístico no levanta cabeza

Es un de los sectores claves en la economía española y que más se está resintiendo por la crisis económica junto con la construcción. El sector de la automoción lo lleva pasando mal desde que comenzó el debacle económico, especialmente en La Rioja.

De hecho, el descenso de matriculaciones de vehículos en nuestra comunidad durante el pasado mes de noviembre dobla al del resto de España: un 13,07% frente al 6,4%. Las cifras son aún peores si analizamos la variación acumulada: desde hace casi un año, el número de matriculaciones acumula un bajón del 22,11%.

Y las perspectivas no son mejores para el año que viene. Martín Novoa, gerente de Auto Iregua Logroño, concesionario de Citröen, asegura que los concesionarios riojanos terminan el año mal y no esperan comenzarlo mucho mejor. Las ventas no están remontando ni de cara a Navidad. “Pensábamos que este segundo semestre iba a ser mejor que el primero que fue muy malo, pero no ha sido así” asegura Novoa, “en este momento las ventas siguen cayendo, la situación es complicada y preocupante”.

Los responsables de concesionarios en La Rioja temen que la situación empeore y que, tanto en concesionario como en taller, se vean obligados a ajustar plantillas, algo que habían evitado durante todo este tiempo.

Las ventas caen a todos los niveles. Novoa apunta a que se han dejado de vender vehículos de todo tipo aunque la alta gama aguanta mejor el tipo que los vehículos de media alta y media baja gama.

¿La solución? Un nuevo Plan Renove que dinamice las ventas en automoción. Al menos, esa será una de las propuestas que el sector lleve al nuevo Gobierno del Partido Popular. “Se ha demostrado que los anteriores planes han dado muy buenos resultados. Y es conveniente aplicar un nuevo por varias razones: porque la automoción es una industria muy importante en España y necesita apoyos, por seguridad ya que los vehículos antiguos son más inseguros y por el medio ambiente, ya que un turismo viejo contamina más que uno nuevo”.

Además esta última razón es de peso: en La Rioja, el parque de vehículos de más de 10 años ya significa el 50% del total que hay en circulación.

La esperanza del sector es ese nuevo Plan 2000E que dio muy buenos resultados hace un año y que garantizaría no solo las ventas, sino el mantenimiento del empleo.