“En la escuela falta una asignatura, mi tiempo libre”

La Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos, (CEAPA) ha organizado la primera huelga de deberes de España con el fin de “reivindicar más tiempo libre para los niños”. Desde la Confederación riojana explican que con esta “huelga” lo que pretenden es establecer un debate sobre el tiempo que dedican los niños ha hacer los deberes, otra forma de enfocar la educación.

Y es que, desde FAPA Rioja apuestan también por incidir en las “competencias clave”. En este sentido, aseguran que “educar también es visitar un museo contar lo visto en clase, ver una película y redactar una crítica o ir a hacer la compra y realizar los pagos para ejercitar las matemáticas”. “Somos partidarios de que existan los deberes pero debemos enfocarlos de otra manera. No queremos deberes esclavos que tienen al niño pegado al pupitre durante horas un tiempo que restan a su esparcimiento porque los niños tienen que tener tiempo para jugar y aburrirse”.

Por esta razón, aseguran, “el éxito de esta convocatoria es que se genere un debate en el que participen padres y profesores y se empiece a hablar de este asunto”. Porque es fundamental, prosiguen, “abrir el debate sobre el modelo educativo, de trabajar conjuntamente para cambiar lo que siempre se hizo así”. Sobre todo, en lo relativo a los deberes escolares, asunto sobre el que aseguran “se ha retrocedido y mucho”.

Afirmación que basan en informes internacionales, de la OCDE y de la OMS que “insisten en que nuestro sistema educativo está en un camino equivocado, que más tiempo diario del alumnado a tareas escolares no es precisamente positivo sino todo lo contrario y que hemos ido prolongando la jornada escolar total diaria del alumnado”. De hecho, poco importa si el centro educativo tiene un tipo de jornada u otra y si pasan más o menos tiempo en el centro educativo, la carga escolar que se delega en la familia con los deberes no ha hecho nada más que crecer. “En un modelo educativo que instruye se entienden los deberes, en uno que educa ya no encajan”.

Hoy en día, relatan, es frecuente encontrarnos incluso con niños y niñas de Educación Infantil, que tienen entre 3 y 5 años normalmente, llevando deberes para casa. Pocos, seguro que sí, pero los llevan. Desde ese momento, el tiempo dedicado a estos se va incrementando y los niños de Educación Primaria, a sus cinco horas diarias de clase, añaden varias más para acumular una jornada de trabajo que algunos adultos no aceptarían. Cuando llegan a la Educación Secundaria, si no antes, su tiempo libre se ha esfumado. Los datos nos dicen que llegan a tener hasta 60 horas a la semana dedicadas a satisfacer las imposiciones del sistema educativo. Trabajan mucho más tiempo que un adulto. Y son menores de edad. Las familias lo sabemos muy bien, vemos la realidad diariamente en nuestras casas. Deberes toda la tarde y fines de semana sin salir.

Por esta razón, “resulta demoledor comprobar cómo muchas personas piensan, y afirman públicamente, que los niños y niñas se tienen que acostumbrar a sufrir desde muy pequeños para una vida que será muy dura”. En lugar de buscar la forma de prepararlos para la vida respetando sus derechos, asumen que serán vulnerados y les acostumbran a que ello suceda.

Por todo ello, “es imprescindible hacerles ver que la sociedad no puede aceptar por más tiempo que sigan actuando como si los menores tuvieran varias vidas a su disposición y como si no pasara nada por malgastar la primera”.