Los floristas de Logroño exigen al Ayuntamiento que ubique el mercadillo de las Flores cerca del cementerio

La Asociación Riojana de Floristas, integrada en la FER, ha manifestado su más enérgica protesta por la celebración durante los días previos a la festividad de “Todos los Santos” de un mercadillo de venta de flores en la ciudad.

El sector considera que no es oportuno que dicha actividad comercial se desarrolle, teniendo en cuenta que las floristerías de Logroño ya presentan la suficiente oferta, como para que no sea necesario introducir una actividad complementaria en forma de mercadillo que, en muchos casos, está integrado por personas que no proceden del sector profesional y que, por tanto, no ofrecen al consumidor las suficientes garantías. En el mejor de los casos cumplen de manera coyuntural con la reglamentación vigente con la inspección de Trabajo y de Hacienda.

En el caso de que este mercadillo se siga celebrando, el sector cree que es necesario que el Ayuntamiento cobre la correspondiente Tasa de Ocupación de la Vía Publica, y que esa tasa redunde en mejoras claras en el ejercicio de la actividad comercial de venta y en un esfuerzo adicional tanto en la iluminación como en la limpieza de la zona.

La Asociación también critica al concejal responsable de esta actividad, quien no accedió al mercadillo para conocer “in situ” las condiciones en que se estaba desarrollando. Finalmente, este mercadillo ocasiona un evidente perjuicio a la actividad profesional de los establecimientos de floristas distribuidos por la ciudad.

La Asociación Riojana de Floristas, no está a favor de los mercadillos de flores, ya que considera que la mejor oferta y de mayor calidad se realiza en los las establecimientos dedicados a la venta de plantas y flores durante todo el año,

Si, finalmente, los responsables del Ayuntamiento de Logroño, a pesar de esta queja, siguen adelante con el mercadillo, el sector empresarial solicita que se realice lo más dignamente posible y siempre garantizando que los expositores cumplan con las normas laborales, fiscales y en materia de consumo de este tipo de venta al aire libre, con la colaboración del Ayuntamiento de Logroño.

El objetivo final es que los compradores puedan acceder a un recinto bien acondicionado con limpieza, buena iluminación, etc. E incluso cambiando su ubicación hacia una ubicación con más lógica, que podía encontrarse en los alrededores del cementerio municipal.