Posible nueva victoria de Morales en las urnas

A pesar de que los resultados oficiales de las elecciones regionales y municipales celebradas el pasado domingo no se conocerán hasta el 24 de abril, el presidente de Bolivia, Evo Morales, parece augurar la victoria de su partido.

Tras el término de la jornada electoral, Morales ha invitado a los gobernadores de la oposición a sumarse al proceso de cambio y a superar la confrontación y ha asegurado que en “la democracia boliviana de hoy” se logra el poder “con el respaldo del pueblo antes que con balas”, según ha informado la Agencia Boliviana de Noticias (ABI).

Cinco millones de bolivianos acudieron ayer a las urnas para designar a los gobernadores de los nueve departamentos, a 337 alcaldes y a los miembros de las asambleas legislativas departamentales y de los Concejos Municipales.

Según las primeras encuestas a pie de urna, y a falta de datos oficiales, el Movimiento al Socialismo (MAS) de Morales se habría hecho con la victoria en la mayoría de los departamentos pero no habría logrado cambiar de forma significativa el mapa político del país, ya que la oposición derechista habría conseguido mantener el control en los distritos de Santa Cruz (este), Beni (norte) y Tarija (sur).

En sus declaraciones, el presidente boliviano convocó a la oposición a sumarse al proceso de cambio y a dejar de lado la confrontación para llevar adelante cinco años de gestión y reiteró que el Gobierno está dispuesto a trabajar con las candidaturas opositoras vencedoras en estos comicios siempre y cuando coloquen el interés y el beneficio de las poblaciones por encima de los intereses partidarios o personales.

“Aquellos frentes de oposición que decidan sumarse al proceso de transformaciones estructurales que inició el Gobierno en 2006 serán bienvenidos, de lo contrario pueden proponer su propio plan y buscar el apoyo ciudadano”, declaró. “En la democracia boliviana de hoy se logra el poder con el respaldo del apoyo del pueblo antes que con balas, y no como sucedía durante las dictaduras, o con alianzas espurias en los períodos del neoliberalismo”, subrayó.

Morales recordó que el MAS llegó al poder con el apoyo masivo de la población en las elecciones de 2005 y desde entonces ha ganado en forma consecutiva cinco comicios y consultas populares, con más del 50 y el 60% de los votos. Asimismo, expresó su convencimiento de que los resultados han ratificado que la Bolivia “democrática y participativa” está inmersa en un proceso imparable de reformas estructurales beneficiosas para el pueblo.

Previamente a las declaraciones de Morales, el vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, pidió al electorado elegir con su voto a candidatos de la oposición o el oficialismo, pero que no estén involucrados en la intentona de golpe Estado y derrocamiento del presidente Evo Morales entre 2007 y 2008.

“Vamos a trabajar con todo el mundo, opositores, no opositores, pero la clave es que no sean golpistas, que respeten la democracia”, apuntó.

El vicepresidente no quiso dar ningún nombre concreto,

conforme a la legislación electoral, aunque en otras ocasiones desde el Gobierno se ha acusado a los gobernadores de Santa Cruz, Rubén Costas; Beni, Ernesto Suárez; Tarija, Mario Cossio, (todos ellos candidatos este domingo a la reelección) y al de Pando, Leopoldo Fernández, de pretender dar un golpe de Estado.

García Linera describió “una historia terrible, macabra, de conspiración, internacional y local, para derrocar al presidente Evo y al gobierno del MAS. Bolivia ha vivido una campaña malévola, criminal de golpe de Estado cívico prefectural entre 2007 y 2008”, subrayó.

“Y en eso participaron prefectos y, tarde o temprano, tendrán que rendir cuentas ante la historia y ante sus votantes”

, dijo García Linera, que pidió, en consecuencia, “contar con gobernadores no golpistas”.