Robert Pattinson: “Veo mucho cine español, me gusta Almodóvar”

Robert Pattinson se ha convertido en un ídolo de masas, más bien de féminas, que sueñan con convertirse en vampiro para poder permanecer toda la eternidad junto a él.

El actor, quien ha mantenido una relación con a su compañera de reparto, ha estado en España, derrochando simpatía y alguna que otra muestra de cansancio, ya que la promoción de la película Luna Nueva les ha hecho viajar a Londres y París. Para recaer finalmente en España, país donde han decidido estrenar la película incluso antes que en Estados Unidos.

El actor ha protagonizado varios filmes, pero sin lugar a dudas este es el que más repercusión le ha dado, por lo que ha sufrido ataques de pánico por el agobio que el fenómeno fan le producía. Considera que ha hecho un ejercicio muy importante para superar dicho contratiempo y eso es lo que le permite desdoblarse y ser feliz y disfrutar con los fans.

-¿Qué dificultades has encontrado en esta segunda parte de la saga de Crepúsculo?

-He tenido mucho tiempo para reflexionar y pensar sobre lo que quería hacer y cómo quería afrontarlo. Ya que mi participación en la película es muy pequeña, toda la responsabilidad no recae sobre mí sino más Taylor, que ha tenido que pasar un año preparándose y entrenándose para ello. Cambiar la importancia de los papeles estuvo muy bien, estuve algo mucho más relajado que en la anterior.

-¿Cuál es tu parte favorita de la película?

-Mi escena favorita del film es justo antes de que Bella y yo rompemos tras la casa de Bella, en el exterior, se me ocurrió proponerle otra opción, rodamos tal y como estaba previsto. Y luego fui directamente al director y le dije que yo pensaba que había que hacerlo de otra manera, y he de reconocer que hay que tener mucho valor para ser un director y aceptar mi idea con todo lo que eso implicaba para un rodaje cinematográfico, presupuesto, tiempo.

-¿Qué crees que has hecho para que ser un vampiro no inspire miedo sino todo lo contrario?

-Yo creo que esto es lo que ocurre siempre en la películas, sientes pena o lástima por el personaje hasta que entra en la habitación y hace algo terrorífico. Que yo no lo haría. Mantener el miedo es complicado o al menos es la sensación que tengo cada vez que veo mi personaje, al menos desde mi perspectiva. He trabajo mucho el lado oscuro de Edward, en principio debería tenerlo porque es un vampiro, pero quizá no lo tiene y por eso no se ve tanto o igual es mi propia percepción de Edward. Aunque no nos podemos olvidar de que estamos hablando de ficción.

-¿Cómo llevas los encuentros con fans y si crees que este fenómeno pueda afectar a tu carrera?

-Creo que la única manera de tratar de ser feliz y estar contento con todo este fenómeno es cambiar la forma de visión del hecho. Es complicado, ha ido todo muy deprisa y han sido dos películas muy seguidas. Cuando una cosa como esta te explota, el fenómeno fan crece tan deprisa te hace perder un poco el control. Para poder saber colocar cada cosa en su lugar he tenido que aprender a disociarme, porque creo que al principio te hace ilusión y te halaga, podía manejar que mi ego creciera, pero llegó a unos niveles que eran muy difíciles de controlar, me ponía nervioso pensar que podía gustarle a tanta gente. Hubo momentos en los que pensé que no podría con ello. Ahora puedo entender que hay una adoración por el personaje que represento, no por mi persona y es de la manera en la que he aprendido a controlar y disfrutar de todos estos grandes eventos. Cuantas más veces me repito que es al personaje al que adoran y no a mí, mejor estoy en los encuentros con mis fans, a los que adoro, pero antes no me había ejercitado y me suponía una cosa muy difícil de sortear.

-¿Conoces algún director español y te gustaría trabajar con ellos?

-Veo mucho cine en castellano, pero no quiero meter la pata diciendo ninguno que sea mexicano. Me gusta Almodóvar y el que hizo el Orfanato de Juan Antonio Bayona.