Un sobrecoste de 23,7 millones por no acogerse “al rescate” del Estado
La Rioja es una comunidad que no ha aceptado acogerse al “rescate” del Estado, por lo que ha incurrido en un sobrecoste de 23,7 millones de euros al endeudarse por su cuenta. Las cifras se desprenden de la estimación oficial realizada por el Ministerio de Hacienda. El ejecutivo regional considera que puede financiarse por sí mismo sin necesidad de los préstamos blandos del llamado Fondo de Liquidez Autonómica (FLA). Esta decisión le lleva a pagar más intereses de los necesarios, según aseguran fuentes autorizadas del Ministerio.
El Gobierno riojano paga un sobrecoste anual de 3,65 millones de euros. Pero si se tiene en cuenta todos los años de vigencia del FLA –desde que comenzaron a concederse los préstamos hasta que concluye el plazo de devolución-, el dispendio llega a los 23,7 millones de euros.
En total, las ocho comunidades (Madrid, Aragón, Castilla y León, Extremadura, Galicia, Navarra, País Vasco y La Rioja) que no se han acogido a esta medida habrían pagado un sobrecoste de 1.757,34 millones a lo largo de todo ese periodo, según los datos del Ministerio, que además ha revisado a la baja su estimación inicial (4.000 millones), teniendo en cuenta, entre otros parámetros, el efecto de la actual bonanza en los mercados.
Los presidentes de Madrid, Ignacio González, y Galicia, Alberto Núñez Feijóo, defienden que es rentable económicamente no acogerse al FLA, puesto que da una mayor confianza en la deuda de sus comunidades a medio y largo plazo. Según las cifras del Ministerio de Hacienda, las regiones que sí lo han aceptado se han ahorrado un total de 5.849 millones de euros.
En la misma línea que sus homólogos González y Feijóo se ha mostrado el presidente de La Rioja, Pedro Sanz, quien ha señalado que de haber acurrido al FLA en su momento, “cuando había aquel boom”, se les habría tachado de “malos gestores” y de tener una comunidad “en quiebra”. “No fuimos porque teníamos solvencia económica y gestionábamos mejor nuestros recursos”, ha añadido.
Sanz ha apuntado que a su ejecutiva no le cuadran las cuentas que ha hecho públicas el Ministerio de Hacienda, pero no ha querido entrar en más detalles. Lo que sí ha recalcado es que no haber pedido financiación directamente al Estado le ha dado a la comunidad un valor “incalculable” en cuanto a imagen y solvencia económica.
0