Unos 1.200 inmigrantes carecen de tarjeta sanitaria en La Rioja

Tras la reforma sanitaria aprobada por el gobierno central hace exáctamente dos años, el aceso al sistema público de salud se ha convertido en una incógnita para los inmigrantes, en función de la zona de nuestra geografía en que se encuentren. Mientras Asturias y Andalucía han mantenido, en teoría, la cobertura total a los inmigrantes, otras comunidades como Castilla-La Mancha han aplicado al pie de la letra la normativa retirando la tarjeta sanitaria a todos los ciudadanos extranjeros en situación irregular.

Esta arbitrariedad, que deja que cada comunidad autónoma establezca las condiciones de acceso al sistema sanitario público, ha sido objeto de un estudio de Médicos del Mundo en el que denuncian la desigualdad a la que se enfrentan los inmigrantes en función del territorio en que se encuentren.

La Rioja es una de las comunidades que han establecido excepciones en función de las patologías. En concreto, la normativa establece que sí se atenderán los casos de enfermedades de salud mental y los de enfermedades consideradas de riesgo para la salud pública, contagiosas o de declaración obligatoria. No consta sin embargo un tercer supuesto que sí contemplan otras comunidades, el de las enfermedades crónicas.

En la práctica, diversas fuentes de los centros de salud y el hospital de esta comunidad aseguran qeu se dan habitualmente casos en los que se obliga al paciente a firmar un compromiso de pago por la asistencia recibida. Otras fuentes aseguran que, tanto los enfermos crónicos como los de patologías de salud mental o contagiosas, están recibiendo atención incluso sin contar conla documentación en vigor. Lo que sí parece claro es que hay en La Rioja unas 1.200 personas que no tienen tarjeta sanitaria.

En otras comunidades como Aragón, Galicia, Valencia o el País Vasco, los gobiernos autonómicos han creado “programas complementarios específicos” para dar cobertura a los inmigrantes aunque la realidad, es que muy poca gente hace uso de ellos. Según la ONG, apenas se conocen y plantean además importantes trabas administrativas.

Desde Médicos del Mundo se está alertando además de que esta medida, además de suponer una injusticia a nivel humano y social, acarreará problemas económicos ya que los inmigrantes acaban acudiendo a urgencias como único recurso, una vía mucho más cara que la atención primaria. Además, al carecer de la cobertura sanitaria, no acuden al médico hasta que las enfermedades están ya muy avanzadas, con tratamientos consecuentemente más costosos.