Uribe, indignado con la última declaración de las FARC

La última declaración de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) ha despertado la indignación y el enfado del presidente colombiano, Álvaro Uribe. El mandatario no ha dudado en acusar a las FARC de ser un grupo “cínico” y “asesino”, después de que la guerrilla se atribuyese y justificase el asesinato del gobernador del departamento de Caquetá, Luis Francisco Cuéllar.

El Bloque Sur de las FARC se atribuyó a través un comunicado el asesinato de Cuéllar, aunque aclararon que se trata de un hecho “indeseado y trágico” motivado por la orden dada desde el gobierno de Uribe de rescatar a los rehenes de la guerrilla “a sangre y fuego”.

En un comunicado enviado a la agencia ANNCOL, las FARC indicaron que la intención de secuestrar a Cuéllar, a quien vinculan con el paramilitarismo, no era “ajusticiarlo” ni exigir el pago de un rescate, “sino realizarle un juicio político por corrupto”. La guerrilla alega que el fallecido prevaricó durante su mandato y llegó a descontar a algunos de sus empleados 100.000 pesos (unos 35 euros) del sueldo “como condición para preservar el puesto”.

Para las FARC la actitud del presidente Uribe es “hipócrita” ya que el Ejecutivo primero declara la guerra para luego “derramar lágrimas de cocodrilo, hacer pantomima y politiquería reeleccionista con el dolor ajeno”.

“Ni Colombia ni el mundo deben olvidar que el actual presidente ha transformado al aparato del Estado en una corrupta maquinaria de guerra paramilitar y contrainsurgente y a cada uno de los [...] gobernadores y alcaldes en piezas claves para desarrollarla y ejecutarla”, agregaron las FARC, que persisten en su intención de liberar unilateralmente al cabo Pablo Emilio Moncayo y al soldado Josué Daniel Calvo.

Tras esta declaración, el presidente Uribe ha mostrado su indignación a través de una entrevista en Radio Viva, donde el mandatario ha denunciado que los “narcoterroristas” son “asesinos y mentirosos”. “Derrama sangre, y miente”, indicó, al tiempo que mostró su disposición para concluir con las décadas de agresiones de las FARC “para que el país pueda vivir en paz”.

Uribe denuncia que la guerrilla cuenta con enlaces en Europa que “escriben comunicados en favor de estos criminales”, según informó Radio Caracol. A estos colaboradores, que cuentan con un título universitario, según Uribe, el presidente los considera “criminales de cuello blanco”.

También aludió el mandatario a un documental en el que la guerrilla se presenta ante el mundo como un movimiento de campesinos dedicado a cultivar la tierra y que usa las armas para defenderse. Sin embargo, en realidad “lo que hacen es explotar a los campesinos poniéndolos a sembrar coca y ellos se ganan la plata”. “Ahora estos verdugos del pueblo colombiano quieren posar de campesinos”, manifestó.

Horas después de la reacción de Uribe, la Fiscalía General notificó la detención en la ciudad de Medellín de un hombre presuntamente implicado en la planificación del secuestro de Cuéllar. Las autoridades identificaron al sospechoso como Henry López Sarmiento, alias 'El Paisa' o 'Ricardo'.

Los casos de Mocayo y Calvo

Por otro lado, el Alto Comisionado para la Paz en Colombia, Frank Pearl, ha denunciado la doble moral de las FARC en este último comunicado y ha pedido a la guerrilla que demuestre con hechos su aireada intención de liberar al cabo Pablo Emilio Moncayo y al soldado Josué Daniel Calvo.

Pearl solicita a la organización que abandone estas acciones y dé la información para que se produzca el operativo de liberación anunciado el año pasado por la propia guerrilla. Las FARC prometieron en abril de 2009 liberar a Moncayo (retenido desde hace más de 12 años) y en junio anunciaron que ampliarían esta decisión a Calvo, secuestrado en abril del año pasado.

Además, Pearl pide a la guerrilla que acepte el país propuesto como mediador. “El cuello de botella es que ellos no han dado el visto bueno a la participación de Brasil”, indicó, en declaraciones recogidas por el diario El Tiempo. “Necesitamos que las FARC demuestre con hechos y no con palabras que quieren liberar a los secuestrados”, subrayó.