Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Trabajadores de las ambulancias de Madrid: “Las empresas se saltan la ley y los retrasos son diarios”

Ambulancia de Santa Sofía, adjudicataria del servicio de traslados programados en Madrid. / Santa Sofía

Sofía Pérez Mendoza

Retrasos habituales de varias horas, enfado de los pacientes, reclamaciones... y actuaciones irregulares. Es la descripción que varios trabajadores de las ambulancias programadas de la Comunidad de Madrid hacen del servicio, responsable de trasladar a los pacientes que no pueden ir por su propio pie a consultas, quimioterapia, diálisis o rehabilitación. “Tenemos de dos a tres horas de retraso todos los días. Y cuando recogemos a alguien en planta para llevarlo a casa, hasta cuatro”, explica uno de los empleados de la concesionaria Santa Sofía, responsable de la mitad del servicio.

Varios conductores relatan que la falta de personal les obliga a desviar sus recorridos para “rescatar” a otros compañeros que están solos y no tienen manos para bajar o subir a los pacientes que lo necesiten a su domicilio. “A veces lo he hecho incluso con mi ambulancia llena, con personas mayores, personas que vienen de quimio...”, cuenta otro trabajador.

El decreto que regula el transporte sanitario en la Comunidad de Madrid (18/1996, de 29 de agosto) establece que las ambulancias colectivas deben siempre llevar un conductor y un ayudante precisamente para estas tareas. Pero los trabajadores aseguran que la empresa se salta esta norma y así también lo confirma la propia compañía, con la que se ha puesto en contacto eldiario.es. 

Fuentes de Santa Sofía admiten que “hay conductores que van solos porque los pacientes van andando y no precisan que se les suba en silla” y culpan de los retrasos a la “actitud de algunos trabajadores” que “deben poner de su parte”. “Todo ha mejorado y los retrasos son mucho menores. Los controles de calidad nos dicen que las cosas van mejor”, defienden. La empresa justifica que el SUMMA controla “constantemente” su actividad: “qué hacemos, adónde vamos, de dónde venimos. Nosotros cumplimos la ley”. 

93 trabajadores menos de lo obligatorio

Según datos del sindicato CGT, Santa Sofía no dispone del número de trabajadores que ofertaron para hacerse con la gestión del servicio. Funcionan con 93 personas menos de las comprometidas con Sanidad: tienen 23 ayudantes en lugar de los 61 obligatorios en el lote 1; y 17 por los 72 que deberían sumar en el lote 3. 

Además, asegura el mismo sindicato, la empresa también incumple los pliegos en lo que a tipos de ambulancia se refiere con muchas más colectivas que individuales. “No está cumpliendo y el SUMMA –dependiente de la Consejería de Sanidad– está haciendo dejación de funciones porque lo vigila”, apuntan varios empleados.

El consejero de Sanidad, Enrique Ruiz-Escudero, admitió en la Asamblea de Madrid el pasado 12 de abril que “las críticas sobre las ambulancias con un solo conductor” es un tema que se “trata habitualmente” en reuniones de representantes de los trabajadores con la Gerencia del SUMMA 112. También admitió hay retrasos, aunque los achacó a la implantación de una nueva herramienta informática. 

El PSOE interpeló al consejero por permitir, como responsable último, el “incumplimiento” por parte de las empresas de las condiciones puestas por Sanidad. “Están incumpliendo sistemáticamente la dotación de personal”, espetó desde la tribuna el diputado José Ángel Chamorro. 

“Lo que pasa aquí no son imprevistos porque saben el número de servicios que tienen que hacer y los horarios de cada uno, es falta de personal”, dice un tercer trabajador a eldiario.es. Los tres empleados con los que se ha puesto en contacto este medio hablan del “estrés” que les provocan las incidencias y de cómo “tienen que dar la cara por la empresa cuando los pacientes se ponen nerviosos porque no llegan a sus citas médicas”.  

108 millones de las arcas públicas

La responsable de transporte sanitario en Madrid de Comisiones Obreras, Alejandra Sobrino, abunda en que “no son sucesos imprevistos”. “Estos pliegos son inviables para dar un servicio de calidad”. Según el sindicato, los retrasos son tales que, cuando un paciente o un familiar llama para pedir explicaciones, se les sugiere que vayan por sus propios medios. 

Este servicio, gestionado por empresas privadas desde su nacimiento, traslada a 4.500 pacientes de la red sanitaria pública cada día y recibe un cuantioso presupuesto de la Comunidad de Madrid: 108 millones de euros para un periodo de cuatro años, según la última adjudicación.

Son 10 millones menos del presupuesto que calculó la Consejería de Sanidad y que recogió en los pliegos de oferta. Las que se ofertaron por menos dinero han ganado el concurso: Santa Sofía (dos lotes), Vitalia y Servicios Auxiliares de Urgencia S.L / Ambulancias María Pita. Todas las adjudicatarias están gestionando este servicio con, de media, recortes de dos millones de euros.

Fuentes de Sanidad aseguran que el “seguimiento es permanente” y que la Dirección General de Inspección está haciendo actuaciones periódicas sobre esta y otras empresas. “Si se detecta algún incumplimiento se va a abrir un expediente”, afirman las mismas fuentes.

Algunas empresas de ambulancias que gestionaron este servicio en el pasado, como Alerta S.A., han sido sancionadas por acumulación de retrasos. Alerta, además, fue expedientada por cobrar a un paciente de la red pública por un traslado

Etiquetas
stats