Las Cocheras de Cuatro Caminos vuelven al proceso para ser Bien de Interés Cultural tras un fallo del TSJM

Vuelta a la casilla de salida. Un fallo del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha enmendado la decisión que tomó en enero de 2019, por la que desestimaba un recurso de Madrid Ciudadanía y Patrimonio (MCyP) por el que intentaba que las Cocheras de Metro de Madrid en Cuatro Caminos pudieran ser declaradas Bien de Interés Cultural, pese a los intentos de la Comunidad de Madrid de archivar este proceso.

La nueva sentencia del TSJM, que fue recurrida por la asociación, anula y revoca el fallo de hace un año, “por haberse basado en un precepto legal expulsado de la jurisdicción declarado inconstitucional”, informa la asociación MCyP en nota de prensa sobre esta infraestructura, que fue construida hace más de 100 años -en 1919- y que esta asociación defiende como parte importante del patrimonio industrial de Madrid.

Con el fallo, la sala deberá dar nueva resolución al contencioso sobre si las Cocheras deben ser o no BIC. El tribunal tendrá que basarse en toda la argumentación procesal y podría decantarse en cualquier sentido. En el caso que eligiera elevar su categoría patrimonial, pondría en cuestión todo el desarrollo urbanístico previsto para la zona, aprobado ya por el Ayuntamiento de Madrid y que incluye la construcción de un torre de viviendas de más de 100 metros de altura.

“Las Cocheras Históricas de Cuatro Caminos son Patrimonio Industrial valioso, con un potencial cultural de gran calado para una capital europea como Madrid. Constituyen la memoria de un siglo de cambios, memoria del trabajo y de la tecnología. Esperamos que las instituciones públicas y los estamentos políticos sepan estar a la altura en este momento del Acuerdo para la Reconstrucción, protejan las Cocheras y modifiquen el planeamiento para hacer compatible su pervivencia”, señala MCyP.

AL dick face

La maquina de hacer sobres de momento parada ...LA Piara Porcina de los nervios.

Luis

400 familias siguen con su calvario sin poder construír sus viviendas, y todo por las cuatro cocheras de las que nadie se acordaba y que realmente no tienen valor patrimonial alguno.