Incentivos como la bajada del IVA y un marco regulador estable, demandas clave del VI Foro Nissan
Los participantes en el primero de los cinco encuentros previstos en la sexta edición del Foro Nissan, celebrado por primera vez de forma virtual debido a la pandemia, han coincidido en reclamar más incentivos para la adquisición de vehículos eléctricos, entre ellos la bajada del IVA, y un marco homogéneo y sencillo para ofrecer a la movilidad eléctrica el impulso definitivo que necesita.
Según estimaciones de Nissan, que compartió ayer su director de Comunicación, Francesc Corberó, “una reducción del IVA para modelos electrificados triplicaría el mercado de estos vehículos en España”. Un mercado electrificado, además, “podría aportar cerca de 90.000 millones de euros al PIB español”, continuó Corberó, al permitir que se desarrollase todo el ecosistema de nuevos negocios que se generarían alrededor de la electromovilidad.
En el primer webinar han intervenido Borja Carabante, delegado de Movilidad y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Madrid, Josep Trabado, director general de Endesa X, la filial de la compañía dedicada a acelerar la transición energética, y Marc Gené, piloto de Fórmula 1 y usuario de vehículo eléctrico, concretamente de un Nissan Leaf e+ con el que confiesa realizar más del 60% de sus desplazamientos cotidianos.
Carabante ha confirmado la clara apuesta del Ayuntamiento de Madrid por esta tecnología como la más eficaz para reducir las emisiones a la atmósfera y el ruido en las grandes ciudades y como eje fundamental del Plan 360 que presentará en breve el consistorio. “Madrid ha decidido optar por la electromovilidad como un vector esencial de la movilidad -ha señalado-; no queremos acabar con los coches, sino favorecer que estos sean no contaminantes”. También ha anunciado la pronta puesta en marcha de un paquete de medidas que incluye ayudas para la renovación de vehículos.
El delegado de Movilidad subrayó la necesidad de mejorar no solo la red de recarga particular, sino también la de carácter público, toda vez que, como recordó, el 70% de los coches que circulan por la ciudad de Madrid duerme en la calle y es ahí donde tendrán que cargarse en el futuro.
Josep Trabado destacó el esfuerzo de inversión que está realizando Endesa para ampliar la infraestructura de recarga en España. “A finales de año tendremos instalados 2.000 de los 8.500 cargadores comprometidos antes de 2023”, aseguró. A las barreras que todavía presenta el vehículo eléctrico, como el precio de venta, una oferta aún por desplegarse y el déficit de autonomía, ha sumado los problemas operativos que se encuentran las compañías eléctricas: permisos y demás burocracia, estructuras de costes fijos y los fuertes gastos que conlleva la instalación de puntos de carga cada vez más potentes. De ahí que demande a las administraciones un marco regulador que homogeneice y simplifique las actuaciones pertinentes; en definitiva, políticas claras que hagan posible el despliegue efectivo de la infraestructura de recarga.
Por su parte, Marc Gené ensalzó las buenas prestaciones del vehículo eléctrico, del que él -acostumbrado al bestial Nissan GT-R- recelaba en un principio, incluso la diversión al volante que es capaz de proporcionar al tiempo que se respeta de mejor manera el medio ambiente. A diferencia de los coches de combustión, cuyo margen de mejora en términos de eficiencia considera casi nulo a estas alturas, los eléctricos tienen aún mucho recorrido en ese terreno, especialmente en lo tocante a batería.
Trabado terció que, con los modernos cargadores de 350 kW que deberían generalizarse, en su opinión, en la red pública de recarga, el proceso de rellenar la batería se reducirá a unos escasos nueve minutos, lo que ya está cerca de los tres o cuatro que cuesta repostar combustible en un coche convencional.
Al hilo de la demanda del responsable de Endesa X de integrar al 100% el vehículo eléctrico en el sistema eléctrico, la primera sesión del Foro Nissan trató de la oportunidad que supone la electrificación para crear nuevas “ventanas económicas” tales como el Vehicle-to- Grid, es decir, la posibilidad de que el coche proporcione energía a los hogares y a las oficinas y, por qué no, ir un paso más allá como están haciendo ya otros países donde empieza a ser posible pagar en energía determinados servicios como puede ser el de aparcar en un parking.
