La economía regional se mantiene estable con una previsión de crecimiento del 4,6% para 2022

La Cátedra de Competitividad del Colegio de Economistas y la Universidad de Murcia prevén un crecimiento del 4,6% del PIB en la Región de Murcia para 2022, según los resultados de la estimación realizada en marzo de 2022 por el equipo Hispalink-Murcia para el proyecto de Modelización Regional Integrada.

Para el trienio de 2022 a 2024, los miembros de Hispalink-Murcia prevén un crecimiento medio anual del 4,0% del PIB en la Región de Murcia, manteniendo el escenario de recuperación iniciado en 2021 pero con un ritmo más moderado y análogo al previsto para el conjunto del país con una tasa media anual del 3,9%.

Las proyecciones sobre el empleo regional en el mismo periodo (2022-2024) muestran un aumento del 3,5%, 2,9% y 2,1%, respectivamente, compatible con la mejora sostenida de la productividad laboral. Esta dinámica del empleo se traduce en la creación de 22.100, 19.400 y 14.000 puestos de trabajo, respectivamente.

Las predicciones de crecimiento de la economía de la Región de Murcia para el trienio 2022-2024 están muy influenciadas por la coyuntura actual caracterizada “por una elevada incertidumbre”, consecuencia directa de varios factores: el conflicto bélico de la invasión rusa de Ucrania, el excepcional crecimiento de los precios de la energía eléctrica, el gas y el petróleo, la huelga del transporte por carretera, la incipiente elevación de los tipos de interés y el desconcertante aumento de la tasa de contagios en algunas ciudades chinas que ha encendido las alarmas sobre la formación de un escenario inflacionista y débil crecimiento.

Las expectativas de crecimiento generadas por el plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia derivado de los fondos europeos Next Generation, señalan desde el el equipo Hispalink-Murcia, están siendo contrarrestadas por los efectos negativos de los factores coyunturales mencionados y el cambio de orientación de la política monetaria de los bancos centrales ante el elevado riesgo de que las presiones inflacionistas en los componentes energéticos se propaguen también hacia el resto de bienes y servicios, elevando significativamente la inflación subyacente.

En consecuencia, las predicciones realizadas en el momento actual están muy supeditadas a la intensidad y duración de los efectos adversos producidos en este nuevo escenario bélico, inflacionista, con estrangulamientos logísticos, subidas de los tipos de interés y la amenaza permanente de los nuevos brotes del virus COVID-19.

El 'efecto rebote' de 2021 fue menor del esperado tanto en el ámbito regional como nacional, con un crecimiento del 4,9% y 5,1% respectivamente, claramente insuficiente para compensar la inédita caída registrada en 2020. Las previsiones de crecimiento de la economía regional para el trienio 2022-2024 mantienen el escenario de recuperación, pero con un ritmo más moderado respecto del crecimiento regional en 2021 y análogo al previsto para el conjunto nacional. No obstante, a finales de este año 2022 la economía regional alcanzará los niveles de PIB existentes en 2019 mientras que en el ámbito nacional habrá que esperar hasta 2023.

Se prevé una desaceleración en el ritmo de crecimiento previsto del PIB regional desde el 4,6% en 2022 y 4,1% en 2023 hasta el 3,2% en 2024. Desde la perspectiva sectorial se espera que el mayor crecimiento se registre en las actividades de la construcción con un aumento del 8,5%, 11,9% y 7,0%, respectivamente. Por el contrario, para las actividades agrarias se pronostica el menor crecimiento desde el 3,0% en 2022 y el 4,9% en 2023 hasta el 1,3% en 2024.

Análisis por sectores productivos

Ante todas las incertidumbres que inciden en el sector agroalimentario y ganadero, y a la espera de una información más completa, las estimaciones de crecimiento del valor agregado bruto (VAB) del sector primario regional se sitúan en el 3,0% para el año 2022. Por lo que respecta a las actividades industriales (incluida la energía), el incierto panorama que caracteriza la evolución presente de la economía internacional y la prevista para los próximos meses, unida a la ausencia de información que permita el seguimiento de la actividad económica, dificulta enormemente la ya de por sí compleja estimación del crecimiento sectorial.

La previsión actual es que la industria de la Región de Murcia crezca un 2,5% en 2022. Para el conjunto del periodo 2022-2024 se prevé que incremente su actividad en términos reales a un ritmo medio anual del 3,5%.

Las actividades de la construcción mostraron una notable recuperación durante el año 2021 tanto en el componente de actividad residencial como en el componente de obra pública. Las expectativas de crecimiento se consolidan y se estima un crecimiento medio anual del 9,1% para el periodo 2022-2024, casi medio punto porcentual inferior al previsto para el conjunto nacional.

Para 2022 se prevé un crecimiento del 8,5% en la actividad constructora, liderando el crecimiento regional y permitirá superar ampliamente los niveles de actividad existentes en 2019.

Por último, en el caso de las actividades terciarias en el que coexisten un heterogéneo grupo de actividades se prevé un aumento del 5,0% del VAB en 2022 ligeramente superior al esperado para su homólogo nacional. El subsector comercial y turístico mantendrá su recuperación y contribuirá notablemente al crecimiento del sector.

Respecto a la evolución del empleo regional para 2022 y 2023 se prevé un aumento del empleo del 3,2% y del 2,4%, respectivamente, ligeramente inferior al previsto para el conjunto nacional y liderado por el sector de la construcción.

En 2022 se prevé que el mayor ritmo de creación de empleo se concentre en los sectores de la construcción (7,5%) y servicios (3,1%), muy superior al estimado para los sectores agrario (2,5%) e industrial (2,1%).