El nuevo Gobierno de la derecha en la Región de Murcia con el que López Miras buscar consolidarse
Fernando López ha formado gobierno tal y como estaba escrito en el guion que las derechas escribieron la misma noche de las elecciones autonómicas.
Después de la no-negociación, que sirvió para que el electorado de la ultraderecha pensara que pintaba algo en el futuro político de la Región de Murcia, se ha reflejado en dos documentos sin valor jurídico alguno la conformación de las primeras líneas de actuación del primer ejecutivo de concentración de derechas de nuestra autonomía.
Tal y como el propio presidente dijo, ha aceptado los nombres que Ciudadanos le ha propuesto, como también aceptó sin ningún problema todos y cada uno de los puntos que le pusieron encima de la mesa hasta el día de la investidura. Que el presidente del Consejo de Gobierno tenía poca entidad política es algo que venía demostrado desde su elección a dedo por el imputado PAS. Pero la confirmación para los más descreídos ha quedado ahora plasmada con esta doble diana (programa + consejeros en la mitad del gobierno) de la formación naranja.
También estaba en el guion que Fernando López prescindiría de todos los pesos pesados del Partido Popular en los nombramientos. No había más que ver como quedó el Grupo Parlamentario en la Asamblea Regional. Ni rastro de cualquiera que pudiera hacerle sombra. Así ha sido también en esta ocasión cuando ni tan siquiera hay presentes ninguno de los valores municipales del PP, desde Marcos Ortuño (Yecla) o Patricia Fernández (Archena), ni el jefe de la comisión de negociadores, José Luengo (San Javier), dejando a éstos las manos libres para ubicarse en la posible alternativa si al final de la legislatura el Presidente no obtiene unos resultados aceptables en términos de gestión de cara a la ciudadanía. También queda fuera Víctor Martínez, curtido ex-portavoz parlamentario, llamado a ser el relevo de los populares y del que tendremos noticias más pronto que tarde. La lectura política de este movimiento es, sencillamente, que Fernando López busca su consolidación.
En la parte que le ha tocado a Ciudadanos encontramos perfiles que han querido ser presentados como profesionales destacados en sus campos, sin ningún tipo de mancha en sus respectivos expedientes y que aspiran a llevar a la Administración Pública cierto aire de frescura y eficiencia. Lo veremos. Hasta la fecha lo único cierto es la poca o nula experiencia que todos ellos presentan en la gestión pública, lo cual será aprovechado por la maquinaria de comunicación del Partido Popular para ensombrecer cualquiera de los logros positivos que tuvieran los naranjas.
Y ahora, dos notas que para nadie han pasado inadvertidas. Primera, Díez de Revenga asciende al rango de Consejero, es decir, de aforado. No hay que hacer un ejercicio desmesurado de memoria para recordar como las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad se personaban en la Consejería de Fomento en busca de documentación acerca de la denuncia de tratos de favor que desde ese departamento se daba a determinados empresarios. Y tampoco hay que esforzarse mucho para recordar como Pedro Antonio Sánchez se está librando de algunos procesos judiciales por la reforma legal que hace expirar en seis meses las culpas en casos de corrupción política.
Segunda, la Consejería de Isabel Franco se llamará, entre otras muchas cosas, LGTBI. Es la respuesta de los mal llamados “liberales” a la denuncia permanente que la sociedad civil ha hecho del discurso y los actos de Ciudadanos entorno a las entidades que promueven los Derechos Humanos. Increíble cuando ha sido precisamente Ciudadanos quién ha aceptado que la Ley LGTBI de la Región de Murcia cuente con un presupuesto de mil euros, no se haya desarrollado en ninguno de sus apartados ni puesto en marcha el Observatorio que llevaba aparejado. Con ese precedente, pudieran haberle puesto una docena más de adjetivos a la consejería, tendría exactamente la misma credibilidad. Como el Pacto contra de la Violencia de Género suscrito por PP y Cs en la Región de Murcia, que tampoco cuenta con presupuesto o como las enmiendas tumbadas por el PP en los órganos consultivos de nuestra Comunidad Autónoma, negándose a que los docentes de la escuela pública reciban formación en políticas de igualdad.
Isabel Franco, que desde su elección a dedo desde Madrid se comporta como una franquicia robotizada, estará opacada por la desmedida actividad pública de su ya jefe, el Presidente, que avisaba justo antes de su acto en el salón de San Esteban, que no habrá dos gobierno. Traducción, que nadie piense que los responsables de prensa de Ciudadanos podrán hacer y deshacer a su antojo, habrá consigna y todos deberán seguirla.
Mientras, no tenemos una palabra sobre los más de nueve mil millones de deuda que Ciudadanos achaca, literalmente, a la mala gestión del PP, ni tampoco de cómo el “filofascismo”, como así califica el Presidente de la Asamblea Regional, Alberto Castillo a Vox, responderá al primer envite de nuestro nuevo gobierno, los Presupuestos Regionales.
Disfruten de Agosto, nada nuevo bajo el sol.
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