Exploraciones en el Sistema subterráneo del Mortillano confirman que es el mayor de España con más de 140 kilómetros

Nuevas exploraciones llevadas a cabo por la Agrupación Espeleológica Ramaliega (AER) han permitido superar la cifra de los 140 kilómetros de desarrollo en el Sistema del Mortillano (Soba), que alcanza también una profundidad de -950 metros, y que lo convierten en el mayor complejo kárstico español y el quinto europeo.

Así lo ha anunciado este miércoles la asociación en comunicado, en el que ha explicado que durante los tres últimos años, el grupo se ha centrado en el sector de la Cueva Rubicera, explorando y topografiando casi 30 kilómetros de nuevas galerías.

Para ello, según ha relatado uno de los miembros de AER, Ángel García, han montado dos vivacs, ya que las zonas de exploración se encontraban demasiado lejos del exterior como para entrar y salir en el día.

Durante dichas exploraciones se han encontrado con diversas “sorpresas”, como restos de osos o la presencia de una extraña formación que podría ser un nuevo mineral. “Aún está siendo analizado por científicos de la Universidad de Cantabria”, ha comentado García.

No es el único descubrimiento peculiar, pues hace unos años encontraron una cavidad sepulcral que contenía restos de unos seis individuos, con algunos fragmentos de cerámica. “Dimos parte inmediatamente a la Consejería de Cultura, y ellos enviaron a unos técnicos para valorar el yacimiento”, ha recordado otro espeleólogo, Jesús Olarra.

Los trabajos han contado con la colaboración de compañeros de otros clubes, particularmente del grupo La Lastrilla de Castro Urdiales. Espeleólogos de entidades vizcaínas, gallegas y sorianas han participado también en los descubrimientos.

De cara a los próximos meses, los miembros del AER pretenden continuar con sus exploraciones. Además del Mortillano se han retomado las de Ramales, “que teníamos un tanto abandonadas”, ha reconocido Ricardo Martínez, del AER.

Para ello se han puesto en contacto con la Consejería de Cultura, a la que han solicitado permiso para poder entrar en Cullalvera. Se trata de una cavidad explorada hace décadas por espeleólogos del grupo vizcaíno Esparta, quienes nunca publicaron sus trabajos.

“Queremos retomar los trabajos donde se quedaron, y publicar todo lo que exploremos, pues explorar y no publicar no sirve de nada”, ha remarcado Ricardo Trueba, quien espera que la respuesta de la Consejería “sea positiva” pues cree que “Cullalvera aún nos puede sorprender”. A la espera de dicha respuesta, ya han catalogado una decena de nuevas cavidades, en una de la cuales han encontrado restos cerámicos.