Osakidetza pagó más de seis millones de euros en complementos salariales no previstos
El Tribunal Vasco de Cuentas Públicas (TVCP) ha detectado que en 2011 Osakidetza pagó diversos complementos de productividad al personal por un valor de 6,3 millones de euros que no estaban previstos en el acuerdo que regula las condiciones de trabajo de sus empleados. Esta es una de las irregularidades detectadas en su informe de fiscalización.
Tanto Osakiedetza como Osatek, la empresa pública que gestiona las resonancias magnéticas, cometieron algunas irregularidades durante ese ejercicio. Entre ellas se señala que se abonaron tres millones de euros en concepto de complementos de productividad por la sustitución de médicos en unidades de Atención Primaria, otros 2,7 millones por trabajar los fines de semana y festivos en hospitales, y otros 634.000 euros por cuidados domiciliarios de enfermería. Ninguno de estos complementos, según el Tribunal fiscalizador, estaban recogidos en el acuerdo que regula las condiciones de trabajo del personal de Osakidetza.
Otra de las irregularidades descubiertas es que los centros de Osakidetza fraccionaron contratos menores y la compra de productos, con lo que incumplieron el principio de publicidad y concurrencia. En el caso de la compra de medicamentos, el TVCP ha detectado que se hicieron adquisiciones fraccionadas por un importe total de 69,2 millones y lo mismo ocurrió con otros productos, con un coste de 69,1 millones.
Incremento de presupuesto
También se ha apreciado que hubo un expediente de servicios y otro de suministro, adjudicados por dos y 2,7 millones de euros, que se modificaron y el presupuesto inicial se incrementó en un 100 % y en un 33%, respectivamente.
Sobre las cuentas anuales, el tribunal señala que el balance de situación no recoge los complementos de jubilación del personal sanitario no facultativo procedente de la Seguridad Social, así como de funcionarios del Patronato Antituberculoso, de algunos trabajadores del Hospital de Basurto, ni tampoco la prima por jubilación voluntaria del personal que se jubiló entre los 60 y los 64 años. Estos pagos supusieron un importe de 8,2 millones y Osakidetza los imputó como gasto cuando debían registrarse en el balance de situación.
Prórrogas de contratos que superaron el límite previsto, suspensión de obras por un plazo superior al establecido y la contratación de un trabajador fijo en Osatek sin justificar “la objetividad de su selección”, son otras de las irregularidades que señala el Tribunal Vasco de Cuentas Públicas
