Covite denunciará ante la Audiencia Nacional los homenajes a los ex presos de ETA Ekaitz Ezkerra y a Mikel Orbegozo

El Colectivo de Víctimas del Terrorismo, Covite, ha anunciado que va a denunciar ante la Audiencia Nacional dos nuevos homenajes a ex presos de ETA por posibles delitos de enaltecimiento del terrorismo y humillación a las víctimas. Se trata, por un lado, del tributado a Ekaitz Ezkerra el pasado domingo en la localidad guipuzcoana de Astigarraga, y, por otro, del homenaje a Mikel Orbegozo el pasado jueves en el barrio donostiarra de Intxaurrondo.

Asimismo, ha anunciado que ampliará la denuncia que interpuso por el homenaje a Germán Urizar el pasado 4 de marzo en Bilbao, puesto que este domingo se produjo otro homenaje en la capital vizcaína a este mismo ex recluso, “coincidiendo con la víspera del aniversario del asesinato de su víctima José Manuel Cruz, asesinado por Urizar el 8 de abril de 1991”.

Según ha explicado Covite, en los actos se congregaron alrededor de un centenar de personas para “agasajar entre pancartas, vítores y bengalas a estos tres miembros de ETA”. También les dedicaron un aurresku, lo que el colectivo considera que “tiene como único objetivo honrar su trayectoria criminal”. En su opinión, los tres actos pueden ser constitutivos de delitos de enaltecimiento del terrorismo y de humillación a las víctimas, por lo que instará a la Audiencia Nacional a investigar los hechos.

Covite ha denunciado también la “pasividad y permisividad” a la hora de que se realicen este tipo de actos del Gobierno Vasco y de los ayuntamientos de las localidades donde se llevan a cabo estos homenajes, así como por incumplir la Ley 4/2008 de 19 junio de Reconocimiento y Reparación a las Víctimas del Terrorismo, que “obliga a prevenir y evitar este tipo de homenajes y distinciones a terroristas”.

Según su artículo 4, “los poderes públicos velarán para que las víctimas sean tratadas con respeto a sus derechos, para ello adoptarán las medidas apropiadas para prevenir y evitar la realización de actos efectuados en público que entrañen descrédito, menosprecio o humillación de las víctimas o de sus familiares, exaltación del terrorismo, homenaje o concesión pública de distinciones a los terroristas”.

GOBIERNO VASCO Y AYUNTAMIENTOS

El colectivo que preside Consuelo Ordóñez asegura que, tanto los ayuntamientos como la Consejería vasca de Seguridad, que “juegan un papel clave” en la concesión de los permisos para llevar a cabo este tipo de actos en la vía pública, están “incumpliendo” esta ley.

“Quienes solicitan el permiso para celebrar estos actos públicamente deben describir de forma precisa en qué va a consistir el acto, las pancartas que van a llevar y cómo va a ser la escenografía. Por tanto, es muy difícil que quienes conceden los permisos no sepan que los están confiriendo para la celebración de un homenaje a un miembro de ETA”, ha destacado Ordóñez.

Asimismo, el colectivo de víctimas ha criticado que el 22 de febrero de 2018 el Parlamento Vasco realizó una declaración institucional de rechazo explícito a los homenajes a ex presos de ETA al considerarlos “contrarios a la defensa de los Derechos Humanos y por suponer una revictimación de las víctimas” y que, a pesar de ello, “los homenajes siguen produciéndose con total impunidad e indiferencia por parte de las instituciones vascas”. El Parlamento Navarro también lo hizo en los mismos términos a finales de 2017.

Por ello, ha reclamado a los representantes públicos que “sean consecuentes con su propia declaración y se impliquen en el mandato legal de velar por que este tipo de actos dejen de producirse”.

A juicio de Consuelo Ordóñez, “los homenajes públicos a miembros de ETA a su salida de prisión dejan al descubierto un déficit democrático. Ninguna democracia digna, ningún Estado de Derecho consciente del significado de sus víctimas del terrorismo permitiría que los terroristas fueran homenajeados en la vía pública. Que se sigan celebrando con impunidad es decepcionante”.

En esa línea, se ha preguntado si “las instituciones permanecerían impasibles, la sociedad miraría a otro lado y la Audiencia Nacional negaría la evidencia si los homenajeados fueran los yihadistas de los atentados de Cataluña”.

El colectivo ha recordado que Mikel Orbegozo fue detenido en 2005 y encarcelado por delitos de “integración en organización terrorista, falsedad en documento oficial con finalidad terrorista, tenencia ilícita de armas y resistencia a los agentes de la autoridad”.

Ekaitz Ezkerra, ha explicado, fue detenido el 19 de marzo de 2013 junto a otros miembros de la organización juvenil de la izquierda abertzale Segi y condenado a seis años de cárcel. El Observatorio de la Radicalización de Covite ha documentado ocho homenajes a ex miembros de ETA en lo que llevamos de 2019.