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Entrevista Diputado de Unidas Podemos

Un guardia civil de Podemos de vuelta en el Congreso: “Me lo he encontrado mucho más crispado”

Laura Galaup

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Juan Antonio Delgado (1971, Cádiz) ha vuelto hace unas semanas al Congreso de los Diputados para cubrir la baja de Noelia Vera, que abandonó la política y dejó vacante el único escaño por Cádiz que tiene Unidas Podemos. Este agente de la Guardia Civil es un veterano ya en la Cámara Baja, lleva cuatro legislaturas al frente de los asuntos de Interior y Defensa de Podemos y de Unidas Podemos. Atiende a elDiario.es en su despacho, presidido por un casco de obrero con el lema 'Dignidad para el metal', pocos días después de que en su provincia se haya llegado a un acuerdo para poner fin a la huelga en ese sector, tras varios paros y concentraciones.

Lleva poco más de un mes en el Congreso, se ha incorporado tras la marcha de Vera. ¿Cómo se lo ha encontrado? ¿Cree que hay más crispación que en legislaturas anteriores?

Sí. El cambio empieza porque cuando yo me fui estaba en la oposición y ahora pertenezco a un partido que está en el Gobierno. Aparte de esto, con la entrada de la ultraderecha veo el Congreso ya no más crispado, que siempre en la idiosincrasia del parlamentarismo está la protesta. Antes la teníamos también, cuando salía [Gabriel] Rufián, Pablo [Iglesias] o algún miembro del PP, pero ahora consiste en el insulto puro y duro, graves y groseros. Intentan dejar entrever que se están cometiendo delitos: hablan de golpes de estado. En ese sentido me lo he encontrado mucho más crispado.

Actualmente es el único diputado por Cádiz que tiene el grupo confederal. ¿Qué le ha parecido la actuación del Gobierno ante la huelga del metal en su provincia?

Si miramos en la hemeroteca vemos las palabras de Yolanda [Díaz], las de Irene [Montero] y las de Ione [Belarra] respaldando totalmente el derecho de los trabajadores. Ha habido un apoyo de las tres ministras de Unidas Podemos. Al resto de ministras, incluso a las andaluzas, yo no las he oído. Es verdad que [Reyes] Maroto después sí ha hecho una entrevista diciendo que estaba trabajando de forma muy discreta, pues tendría que ser muy discreta porque no se ha enterado nadie.

Usted ha estado presente en las protestas, pero el alcalde de la ciudad, José María González ‘Kichi’, ha reprochado al Ejecutivo que no se hayan acercado a Cádiz miembros del Gobierno. ¿Cree que la ciudadanía ha echado de menos ese gesto?

Cádiz tiene nueve diputados. El único que ha ido he sido yo. Hay que decir que esto no es una cuestión entre el Gobierno y la empresa, porque se vaya a marchar, como ha pasado en otros casos. Esto es una cuestión laboral, estrictamente laboral, en la que la empresa y los trabajadores se tienen que poner de acuerdo. Aquí el Gobierno no podía hacer más. ‘Kichi’ hace lo que tiene que hacer, está al lado de su gente y yo creo que es un buen alcalde, siempre lo he dicho. En todo caso, las tres ministras [de Unidas Podemos] han hablado y todos los diputados [del grupo confederal] se han subido al estrado y también han mencionado a Cádiz. El sábado anterior yo fui a una manifestación multitudinaria, que recorrió una de las arterias principales de Cádiz. De los nueve diputados de la provincia fui el único que acudió. Esto no es cuestión de poner un tuit, hay ir allí a mojarse con la gente.

Incidiendo en eso, ¿no cree que el ciudadano de Cádiz ha podido echar de menos que esas ministras que han puesto tuits o han hecho declaraciones no se hayan acercado?

En este caso concreto no era un problema que pudiese resolver una ministra. Imagínese usted que las ministras estuviesen visitando todos los conflictos colectivos que hay en España. Lo que sí hicieron fue empatizar. Creo que estuvieron cerca. Hubo una representación del partido. Estuvo Lilith Vestrynge, secretaria general de Podemos; Martina Velarde, secretaria general de Podemos Andalucía, y yo. A mí lo que me extraña es que los que no están en el Gobierno ni siquiera fueran.

Usted es portavoz adjunto de Unidas Podemos en la Comisión de Interior. Fue muy criticada la presencia de una tanqueta de la Policía Nacional circulando por barriadas obreras. ¿Cómo valora la actuación del Ministerio del Interior?

Un error. La provincia de Cádiz es la segunda zona, después de Huelva, con el mayor desempleo de toda Europa. Lleva 40 años perdiendo poco a poco toda la industria. En los años 80 y 90, con la mal llamada reconversión de Felipe González, sufrió un desmantelamiento. En ese contexto, enviar una tanqueta para apaciguar una protesta de padres de familia que se juegan su futuro y el de sus hijos no es la forma de solucionar [un conflicto]. Todo el mundo entiende que la Policía tiene que estar para controlar las manifestaciones, pero lo de la tanqueta fue un error. Y de hecho, tanto es así que al día siguiente la tanqueta ya no estaba.

Cádiz tiene una de las mayores tasas de desempleo del país, una temporalidad por encima del 95% en los contratos y el menor PIB per cápita de España, ¿cuál es el futuro de la provincia?

Hay propuestas interesantes sobre la reindustrialización de Cádiz, de la Bahía de Algeciras y de la Bahía de Cádiz. En la provincia se recoge prácticamente el 98% del corcho que se produce a nivel mundial. Lo recolectamos y lo llevamos a Portugal. ¿No sería más sencillo poner la industria en la provincia? Eso requiere una inversión importante. Somos la provincia con más horas de sol de toda España. Tenemos el sol, tenemos el viento y tenemos costa. Cádiz tiene mimbres suficientes. Somos puente entre Europa y África. A su vez, también tenemos una red ferroviaria, Algeciras-Bobadilla, que no está electrificada y va a gasoil. Va a 30 kilómetros por hora a uno de los puertos más importantes de Europa. Imagínese si esa red estuviese electrificada, si se hubiese apostado desde hace 20 años por el corredor del Mediterráneo.

Conforme pasan los meses cada vez se plantea con más fuerza un hipotético adelanto electoral en Andalucía. ¿Apuesta por un frente amplio para la autonomía?

Aunque no me corresponde a mi porque no soy el secretario general del partido en Andalucía, ni tengo ningún cargo orgánico autonómico, en Andalucía ahora mismo está Unidas Podemos y, por supuesto, que abrimos la puerta a todo el que quiera llamar. Lo que pasa es que ya hemos tenido gente dentro y se ha ido, entonces….

Entonces, ¿le parece complicado?

Nosotros somos un partido con intenciones de gobierno, no estamos cómodos en la oposición. Si nos presentamos en Andalucía es para ganar. Por lo tanto, si la ciudadanía quiere que haya un gobierno de coalición, nosotros estamos dispuestos. El que esté dispuesto, que se venga con nosotros.

A nivel nacional, ¿cómo ve el futuro de Podemos en la plataforma de Yolanda Díaz? La vicepresidenta ha insistido en varias ocasiones que los partidos serán secundarios en el espacio en el que está trabajando.

Tengo clarísimo que Yolanda es la mejor candidata. En el partido, todo el mundo tiene eso claro. Ahí no hay ningún tipo de duda. Lo que venga después se irá viendo. A Yolanda ya se le ve en el CIS: la ministra mejor valorada y cómo empieza a repuntar Unidas Podemos. Estamos ilusionados. Aunque nos van a querer dividir muchos medios de comunicación, no estamos en esa.

Estoy encantado con que Yolanda sea la próxima presidenta. La conozco personalmente. Además ella es de Ferrol y yo soy de San Fernando, dos ciudades donde hay militares y astilleros. Nos entendemos muy bien. Hablamos el mismo idioma. Es una mujer muy trabajadora. Lo que venga después se verá.

A finales de octubre, se manifestaron miles de policías y guardias civiles en Madrid para protestar por la reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana en la que están trabajando las formaciones del Gobierno. Usted es guardia civil. ¿Cómo asume las quejas de estos agentes por el trabajo que está desempeñando el Ejecutivo?

De primeras, con el respeto máximo a cualquier colectivo que se quiera manifestar. En este caso, si prácticamente casi todas las asociaciones de policías y guardias civiles no están de acuerdo con esta reforma legislativa, están en su derecho de manifestarse en la calle. Lo mismo que hacen los que se manifiestan por la independencia o por la libertad de los presos. Respeto para todos.

A partir de ahí, yo no estoy de acuerdo. Actualmente estoy en situación de excedencia, pero soy guardia civil desde hace 30 años. He sido guardia civil con Ley Mordaza y sin Ley Mordaza y jamás vi en peligro mi trabajo cuando no había Ley Mordaza, es decir, durante la mayor parte de mi carrera profesional. Creo sinceramente que los sindicatos y las asociaciones están equivocados.

Además, también hay que destacar que tanto Vox como el PP están intentando politizar a las asociaciones profesionales. Aquellos que ahora están en la pancarta, como el señor Casado, ya sabemos a lo que se ha dedicado su partido cuando han estado en el Gobierno: a la policía política y a desmantelar prácticamente el sistema público de seguridad, hay 20.000 policías y guardia civiles menos. Faltan agentes en la UDEF y en la UCO. Con este Gobierno de coalición se ha realizado la mayor subida salarial de los últimos 30 años a policías y guardias civiles.

¿Cómo se asumen las reivindicaciones de los agentes de policía, de guardias civiles y de miembros de las Fuerzas Armadas en una formación de izquierdas? ¿tiene la sensación de que son asuntos que no se han querido batallar desde la izquierda?

En muchas reuniones reivindico que nos tenemos que quitar los complejos de la izquierda de toda la vida. Yo soy de izquierdas y soy guardia civil. Trato de aportar mi granito de arena para que se nos quiten esos complejos. Dicho esto, me he sentido muy aceptado tanto en Podemos, como en Unidas Podemos. Cuando yo estaba en la Asociación Unificada de Guardias Civiles, el primer reconocimiento a un guardia civil víctima de terrorismo en Cádiz se hizo en Conil de la Frontera, se celebró alrededor del año 2002 con un alcalde de Izquierda Unida que se llamaba Antonio Roldán. Después han venido muchos más. La gente de mi partido es gente sensata, que entiende que tiene que haber unas Fuerzas Armadas y un cuerpo policial. Otra cosa es que no nos guste el modelo policial, a mí tampoco.

¿Qué le parece que Vox trate de capitalizar esas reivindicaciones? Actualmente, en la Comisión de Defensa hay varios representantes de la formación que fueron altos mandos de las Fuerzas Armadas.

Creo que la elección de generales, uno que además firmó un manifiesto en favor de Franco, no le da votos a Vox. Sería diferente si hubiesen puesto a dos soldados, a una persona que ha estado en muchas misiones, un militar que se ha quedado en la calle al cumplir 45 años, a una persona implicada. Un general defensor del franquismo no es el referente de la mayoría de militares ni de guardias civiles.

Tras la condena de Alberto Rodríguez y la decisión de Batet de retirarle el acta de diputado, el escaño de su ya ex compañero de bancada continúa vacío. ¿Cómo ha vivido los reproches que lanzó contra su partido en Salvados por la gestión de ese conflicto?

Alberto se sentaba a mi lado en el Congreso. Le ha tocado pasar algo muy duro. Empatizo con él. Si tiene algún reproche, es un partido con mucha gente, ¿por qué no vamos a cometer errores? ¿somos perfectos?, a lo mejor alguno se ha equivocado con Alberto y no pasa nada. Y a lo mejor en algún momento se ha equivocado él y tampoco pasa nada, aunque no me refiero a este caso concreto. Le ha pasado algo muy grave y estoy totalmente convencido de que lo ganará en Estrasburgo e incluso en el Supremo.