Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Juan Carlos I, un capitán general del Ejército en paradero desconocido

Felipe VI y Juan Carlos I, durante la Pascua Militar de 2018.

Elena Herrera

60

Fuera del trono desde hace más de seis años, Juan Carlos I dista mucho de ser un ciudadano de a pie. El ex jefe del Estado, cuyo destino tras marcharse de España por las polémicas sobre su patrimonio sigue siendo una incógnita más de una semana después, ostenta el título honorífico de rey con carácter vitalicio, sigue formando parte de la familia real y tampoco ha renunciado a sus derechos dinásticos sobre la Corona como sí hizo su padre con él en 1977

Además, Juan Carlos de Borbón sigue siendo capitán general de las Fuerzas Armadas, si bien desde su abdicación se encuentra en la situación de reserva. El de capitán general y jefe de los tres Ejércitos es el máximo rango de las Fuerzas Armadas. Desde 2014 hay dos capitanes generales, Felipe VI, en activo, y Juan Carlos I, en la reserva. 

Según la ley de la carrera militar vigente desde 2007, el emérito debería haber pasado directamente con su abdicación en 2014 directamente a retiro, lo que equivale a la jubilación. Pero el Gobierno de Mariano Rajoy optó entonces por aplicarle la norma que regía en 2003, cuando el monarca cumplió 65 años y hubiera debido jubilarse. 

Esa ley, ya derogada, establecía que al cumplir la edad de retiro los oficiales generales pasarían “a la situación de segunda reserva”. Con esa fórmula el Ejecutivo dijo querer evitar que Juan Carlos I fuera discriminado respecto a sus compañeros de promoción. 

Uniforme y actos militares

Desde el punto de vista militar, pasar a la situación de reserva permite ser activado y ocupar algún destino —algo que no está contemplado en la situación de retirado— además de seguir recibiendo el tratamiento correspondiente al cargo que desempeña en los Ejércitos. En todo caso, nunca se ha contemplado que Juan Carlos I pudiera ser movilizado, si bien este estatus le permite no ser considerado un “jubilado” a efectos castrenses. 

En ambos casos está permitido utilizar el uniforme y participar en actos militares, si bien Juan Carlos I no desarrolla actividades institucionales desde hace más de un año, cuando comunicó a su hijo su voluntad de retirarse de la vida pública coincidiendo con el quinto aniversario de su abdicación de la Corona de España tras el escándalo del caso Nóos. 

Consultado por elDiario.es, Jorge Bravo, presidente de la Asociación Unificada de Militares Españoles (AUME), mayoritaria en las Fuerzas Armadas, declina pronunciarse sobre si es oportuno o no que el rey emérito mantenga ese estatus de capitán general en la reserva dadas las sospechas que existen sobre el origen irregular de parte de su fortuna. No obstante, señala que en el caso de que existiera un “clamor popular y parlamentario” encaminado a cambiarlo, su organización no tendría ningún problema al respecto. 

Etiquetas
stats