Marlaska defiende como “justo, ponderado y legal” el cese de Pérez de los Cobos que anuló la Justicia

El PP y Vox han competido este miércoles en dureza contra el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, al que han pedido de nuevo que dimita tras la sentencia de la Audiencia Nacional que revoca el cese del Coronel Pérez de los Cobos, que tuvo lugar en mayo de 2020 por “pérdida de confianza”, y que obliga al Gobierno a restituirle en su cargo. El ministro, que ya se sometió ayer a preguntas de la oposición por el mismo motivo en el Senado en un tenso debate, sin embargo, ha reiterado que no está entre sus planes dejar el cargo y ha defendido el cese del coronel por considerar que fue “justo, ponderado y legal”. Marlaska, además, ha recordado que la sentencia no es firme ya que contra ella cabe recurso, como ya está preparando el Gobierno.

El rifirrafe ha tenido lugar primero en la sesión de control al Gobierno en donde tanto la diputada del PP, Ana Belén Vázquez, como el vicepresidente cuarto del Congreso y diputado de Vox por Valencia, Ignacio Gil Lázaro, han acusado al ministro de un comportamiento “indigno” contra el coronel y el cuerpo de la Guardia Civil al que pertenece y han considerado que la sentencia es todo “un varapalo” contra el titular de Interior por lo que debe abandonar de inmediato su cargo. “Su comportamiento ha sido intolerable. No tiene usted ya autoridad moral para seguir al frente del ministerio. No es que esté usted quemado, es que está abrasado, es un cadáver político”, le ha espetado la diputada del PP en una áspera intervención.

La diputada del PP le ha recordado el acercamiento de presos de ETA y varias polémicas que, a su entender, convierten al ministro en el “soldado de las tropelías” de Pedro Sánchez. “Nos se arrastre más y si le queda algo de decencia o dignidad, dimita”, ha insistido Vázquez, con la que después ha coincidido en parecidos argumentos el parlamentario de Vox, que también le ha pedido que se vaya porque “ha mentido y prevaricado”.  

Gil Lázaro ha abundado y ha señalado que el comportamiento de Marlaska “es falaz, cobarde, sectario e indigno”, para calificarle luego como “el tonto útil, gestor del chantaje a Bildu”, acusándole además de convertir a la Policía y la Guardia Civil en una “policía política” y de “facilitar la violencia callejera de bandas de izquierdas manejadas y enviadas por Pablo Iglesias” a sus mítines.

Marlaska ha ironizado en su réplica y le ha contestado a Gil Lázaro: “Si yo dimito no tendría usted oportunidad de madrugar los miércoles para tener aquí sus tres minutos de gloria para lanzar falsedades y faltas de respeto”.

Olona acusa a Marlaska de hacer “purgas sistemáticas” en Interior

Posteriormente, el ministro se ha sometido a sendas interpelaciones, también de Vox y del PP, en las que ha lamentado “el hostigamiento” al que le han sometido ambos grupos desde que llegó al cargo. En esta ocasión ha sido la diputada del partido de extrema derecha, Macarena Olona, la que ha continuado cargando con gran dureza contra Marlaska al que ha acusado de hacer “purgas sistemáticas”, de ceder a “presiones políticas” y de “arbitrariedad” en todas sus actuaciones desde que tomó posesión de su cartera. Y también de haber dado hasta “cuatro versiones, todas mentira” sobre el informe que se filtró a la prensa firmado por López de los Cobos. “¿Sabe por qué le ha ratificado el presidente hoy en su cargo? Porque usted traga con todo”, le ha dicho Olona.

La diputada de Vox ha asegurado que el ministro tiene “muy poca vergüenza” por haber vinculado al coronel con la llamada 'policía patriótica' que organizó el anterior titular del PP, Jorge Fernández Díaz. “Mayor ejercicio de cinismo, no cabe”, le ha dicho. La diputada, que se ha dirigido en alguna ocasión a Marlaska con ironía como “querido ministro”, ha deseado “verle pronto sentado en el banquillo de los acusados”, “porque con usted solo hay corrupción en su departamento”, ha afirmado.

En su contestación, Marlaska ha pedido lo primero a la diputada de Vox que retire el calificativo de “florero” que previamente le había hecho sobre la directora de la Guardia Civil y le ha afeado el “tono crispado y carente de rigor” que ha utilizadocontra él con “una base de acusaciones infundadas y con un criterio jurídico que roza el patetismo”.

“No voy a entrar a contestar sus insultos”, ha resumido en su nueva réplica Marlaska, que ha defendido de nuevo su gestión al frente del ministerio basada, según ha dicho, “en asegurar el libre ejercicio de los derechos y libertades de la ciudadanía”.

La misma tónica de descalificaciones y cruce de reproches se ha sucedido después entre el ministro y el diputado del PP, Carlos Rojas, que ha ejercido como portavoz en la interpelación de su grupo. Rojas ha reprochado a Marlaska que haya ido al Congreso “a hacerse la víctima y no contestar a nada” mientras llamaba a la oposición “miserable”. El parlamentario del PP ha acusado también al ministro de “mentir” en sus argumentaciones sobre el cese del coronel López Cobos.

Curiosamente, en su segunda intervención, Rojas ha salido en defensa de Vox por los “ataques” que sufrieron la candidata, Rocío Monasterio, y el líder del partido de extrema derecha, Santiago Abascal, en su reciente mitin de Vallecas. “Usted ha estado escondido ante unas agresiones muy graves, no ha dado la cara y sigue sin darla”, le ha reprochado. “La policia dice que usted les dejó tirados pero usted no dice nada, se calla mientras patean a un policía, que nos representa a todos, como también nos representa el coronel cesado”, ha proseguido.

Marlaska ha cerrado el debate insistiendo en señalar que mantiene “las condiciones del cese” de Pérez de los Cobos porque se ajustó a la legalidad y fue “justo y ponderado”, para luego lamentar la actitud de ambos grupos de la oposición. “Siento haber tenido que asistir a este despropósito, a este perseverante conjunto de acusaciones falsas y medias verdades”. El ministro terminó afeando al PP su “empeño en competir con Vox para ver quien dice la barbaridad más malsonante”.