La policía keniana inicia una investigación por la represión violenta de la manifestación

El inspector general de la Policía keniana, Joseph Boinnet, ordenó hoy una investigación interna para aclarar las acusaciones de brutalidad policial durante la manifestación organizada ayer por la principal coalición opositora en la que un hombre habría fallecido.

Las fuerzas de seguridad han recibido multitud de críticas tras hacerse público un vídeo que muestra cómo un joven corre para escapar de los agentes hasta que cae al suelo y queda inmóvil, esperando a ser apresado por agentes antidisturbios que, sin embargo, comienzan a darle patadas y golpearle con palos de madera.

Según la Comisión de Derechos Humanos de Kenia (KNCHR), el hombre que aparece en el polémico vídeo habría fallecido tras sucumbir a las heridas provocadas por la brutal paliza que le propinaron los agentes, mientras que la Policía ha declinado hacer comentarios.

“Las investigaciones identificarán a los oficiales involucrados y posteriormente se tomarán acciones disciplinarias”, aseguró el portavoz del Servicio Nacional de Policía, George Kinoti, que hablaba en nombre del inspector general.

Por su parte, el Colegio de Abogados de Kenia criticó duramente la actuación policial durante las protestas y la calificó de “muestra de cómo la Policía gestiona manifestaciones legales con técnicas que tienen un parecido preocupante a las tácticas anteriores a la independencia”.

En un comunicado publicado este martes, la asociación exige al Gobierno y a los mandos policiales que pongan en marcha un programa de formación para que los agentes aprendan a desenvolverse en situaciones de gran estrés sin uso excesivo de la fuerza.

Esto significa que la Policía “debe ser capaz de detener de forma eficaz y segura” a aquellos que muestren conductas violentas respetando su derecho “a no ser objeto de castigos inhumanos, crueles o degradantes”.

Desde hace varias semanas, la Coalición para la Reforma y la Democracia (CORD), la principal formación opositora, organiza cada lunes protestas contra la Comisión Electoral Independiente (IEBC), a la que acusa de haber pactado ya con el Gobierno el amaño de los comicios presidenciales de 2017.

La oposición acusa al dirigente de la IEBC, Isaac Hassan, de apoyar al presidente del país, Uhuru Kenyatta, y de haberse confabulado con la alianza gobernante Jubilee para volver a amañar las elecciones, como a su juicio hicieron en 2013.