El PSOE encara las autonómicas en plena guerra fría entre Pedro Sánchez y Susana Díaz
El PSOE se ha citado este fin de semana para preparar las elecciones autonómicas de mayo. Será la primera vez que Pedro Sánchez y Susana Díaz se encuentren después de que la presidenta andaluza haya adelantado los comicios al 22 de marzo, un movimiento que aprueban en Ferraz porque responde a “razones objetivas”, pero que ha levantado suspicacias por la posibilidad de que la dirigente andaluza pueda utilizar un buen resultado para dar el salto hacia la carrera por La Moncloa.
La dirección y los barones socialistas acudirán a la conferencia autonómica después de que la división entre los defensores del secretario general y los partidarios de que Díaz se presente a las primarias se haya hecho cada vez más evidente. A pesar de que es un secreto a voces, el PSOE quiere dar imagen de unidad en ese cónclave en el que tienen previsto llegar a conclusiones sobre regeneración, economía y Estado de bienestar que sienten las bases del programa para mayo.
La presidenta andaluza será la gran protagonista de la reunión en Valencia. Aunque insiste en que su “tren” está en Andalucía, dirigentes socialistas apuestan por que un buen resultado en la región –donde pretende frenar el ascenso de Podemos– será el detonante para que dé un paso al frente y se presente a las primarias previstas para el mes de julio. Incluso el número dos del PSOE, César Luena, no descarta que las aspiraciones de Díaz sean dar el salto a la política nacional.
“La Ejecutiva es de Pedro Sánchez, y punto”, afirma Luena en una entrevista en eldiario.es. No obstante, hay miembros de la dirección que consideran que la baronesa es mejor candidata para disputar La Moncloa a Mariano Rajoy y que dan por hecho que se enfrentará al secretario general. Otros dirigentes consideran que la competición no se llegará a producir porque Díaz no tendrá rival tras las municipales y autonómicas: “Sánchez se irá después de las municipales por la vía de la dimisión o por la vía de una gestora”, dice un destacado líder socialista que pronostica un mal resultado.
Otras fuentes apuestan por que la presidenta no se presentará finalmente a la competición interna, de la que nunca ha sido partidaria. Las especulaciones han despertado preocupación en las filas socialistas. Un barón próximo a Sánchez califica de “suicidio” la posibilidad de que la líder de la federación más poderosa del PSOE se enfrente al secretario general. “Dividir el partido en dos a cuatro meses de las elecciones sería un desastre”, dice un miembro de la Ejecutiva.
Enterrada el hacha de guerra
“Tenemos que ser coherentes: si queremos primarias, tenemos que ser conscientes de que puede salir otro candidato –explica un dirigente del ala izquierda del PSOE–. Se puede presentar quien quiera porque está en su derecho”, añade sobre la posibilidad de que lo haga Díaz. “Habrán creado un personaje para destruirlo”, lamenta un barón.
También hay malestar en Ferraz con algunos de los principales valedores del ascenso de Sánchez después de que se reunieran con los dirigentes de Podemos. Hay quien acusa a José Luis Rodríguez Zapatero, José Bono y Emiliano García-Page de “deslealtad” por haber asistido a esa cena “con el secretario general del partido que te quiere hacer desaparecer”. Los asistentes han intentado restar importancia al asunto y la dirección del PSOE también ha optado por zanjarlo tras haberlo criticado con dureza.
La división entre los fieles a Sánchez y quienes no le muestran su apoyo incondicional como posible candidato a las primarias se hizo patente este martes en Bruselas. A la dirección no le sentó nada bien la aparición de un barón en una cena informal que Ferraz habían organizado con periodistas y en la que aprovechó para dar detalles sobre la situación por la que atraviesa el PSOE y criticar que la dirección diera excesiva importancia al encuentro con Pablo Iglesias e Íñigo Errejón.
