En algún lugar hay algo que necesitas leer.
2016: ¿El año gafe?
2016 está siendo inolvidable. En muchas cosas, para mal. Hemos tenido grandes pérdidas, especialmente dentro del mundo de la música y el cine.
Pero lo más impactante ha salido de las urnas. Varios procesos electorales han tenido resultados inesperados y han sorprendido y preocupado a todo el mundo, especialmente por las consecuencias que pueden tener. Además, algunos activistas han sido asesinados en medio de sus luchas contra lo que consideraban injusto y por los derechos de sus comunidades.
En la política y el activismo
Brexit
El 23 de junio, Reino Unido decidió abandonar la Unión Europea. El resultado del referéndum sobre la permanencia en Europa que convocó el entonces primer ministro David Cameron sorprendió al mundo, en un hecho histórico y de efectos imprevisibles no solo para sus socios europeos. Las encuestas apuntaban a un resultado ajustado, pero la mayoría siempre se decantó por el rechazo a la propuesta. Londres aún no se ha desligado de Bruselas, ya que Downing Street aún no ha activado el artículo 50 del tratado de Lisboa, que es el que da inicio al proceso. Pero lo ocurrido le costó el puesto a Cameron y encumbró a la que era su ministra del Interior, Theresa May. Además, desde el Brexit han aumentado las denuncias por agresiones xenófobas en territorio británico.
El 'no' a la paz en Colombia
Parecía que todo el proceso para que Colombia y las FARC alcanzasen un acuerdo estaba hecho. Solo faltaba un referéndum que avalase las negociaciones entre el presidente Juan Manuel Santos y Timochenko. Pero los colombianos votaron 'no' y todo se paralizó. Ocurrió el 2 de octubre, cuando nadie esperaba un resultado distinto al 'sí'. Este rechazo a las conversaciones con las Farc fue liderado por el expresidente Álvaro Uribe, que aseguraba que el pacto daría impunidad a líderes responsables de graves crímenes, premiaría a los criminales al permitirles participar en política y erosionaría la Constitución y las instituciones de Colombia. Por el momento, la tregua para un alto el fuego continuará hasta el 31 de diciembre. A pesar del fracaso momentáneo del proceso, Santos fue galardonado con el Nobel de la Paz en octubre.
La victoria de Donald Trump
Pocos lo vieron venir. Las encuestas se apretaron en los últimos días, pero todas apuntaban a que Hillary Clinton sería la primer mujer en presidir Estados Unidos. Finalmente, la realidad golpeó al mundo y a muchos estadounidenses. La primera potencia mundial tendrá un presidente al que se puede definir por sus palabras y actos como xenófobo, misógino y maleducado. Frases salvajes contra las mujeres, los gays, los periodistas o los discapacitados, acusaciones de abuso sexual de varias mujeres, expresiones machistas y denuncias por evadir impuestos también forman parte del bagaje de Trump.
Tras confirmarse que era presidente electo, moderó su tono y hasta elogió a Clinton, a la que llamó “asquerosa” en un debate televisivo. Su reunión con Obama, al que acusó de no ser estadounidense y de fundar ISIS, también dejó otra sorpresa: definió al que será su predecesor como un “buen hombre” y hasta aseguró que le pediría consejo cuando fuese nombrado el 45º presidente el 20 de enero.
La expulsión de los refugiados acordada por la UE y Turquía
Marzo fue un mal mes para la solidaridad. El que inició el del gran fracaso de Europa, al no responder a la mayor crisis humanitaria desde la II Guerra Mundial. Fue cuando Bruselas decidió dar la espalda a todos los refugiados que llegaron a su territorio hasta el día 20 de ese mes. Según el acuerdo, todas las personas que llegasen a las islas griegas de forma irregular serían devueltas a Turquía de forma individual. Muchos centros abiertos se transformaron en centros de detención. Además, se acordó recolocar a un número determinado de refugiados sirios, pero solo a uno por cada otro migrante expulsado hasta una primera tanda de 72.000. Poco antes, el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, instó a los migrantes económicos a no venir a Europa. Así, quedaba prácticamente cerrada la ruta de los Balcanes.
Algunos gestos hacia los refugiados llegaron con la muerte de Aylan, que conmocionó al mundo. Pero no se ha dado la misma reacción con los más de 300 niños que también fallecieron entre Grecia y Turquía tras la foto del niño sirio de septiembre de 2015.
El asesinato de Berta Cáceres
El nombre de la líder indígena hondureña era conocido por la importancia de su labor: dedicó su vida a luchar por los derechos de su comunidad y por el Medio Ambiente, junto a su denuncia de las represalias contra otros activistas como ella por poner el foco en lo que consideraban abusos de las empresas transnacionales extractivas, hidroeléctricas o del sector agroindustrial en Honduras.
Fue asesinada el 3 de marzo, una semana después de una rueda de prensa en la que reveló el asesinato de algunos de los que encabezaban su comunidad indígena y que ella misma estaba siendo amenazada. Menos de dos semanas después asesinaron a uno de sus compañeros, Nelson García. Cuatro meses después, el 6 de julio, también fue asesinada su colega Lesbia Yabeth.
Muhammad Ali, la desaparición de un referente
El mejor boxeador de todos los tiempos aparecía cada vez menos en público. El parkinson que padecía se agravó con los años y provocó que tuviese que ir siempre acompañado a sus pocos actos con su esposa Lonnie, con la que pasó los últimos 30 años de su vida. Murió el 3 de junio por causas naturales a los 74 años, recibiendo homenajes en todo el mundo. Pero Ali no fue solo un referente en el boxeo, donde fue campeón de los Pesos pesados y medalla de Oro en los Juegos Olímpicos de Roma en 1960. Su lucha por los derechos de los negros, su conversión al islam o que rechazase ir a la guerra de Vietnam ya que no tenía “nada en contra de los Viet Cong” le llevaron a ser uno de los activistas más mediáticos e importantes del siglo XX. En una entrevista, que se hizo viral tras su muerte, resumía con humor por qué los negros eran discriminados solo por su piel.
Música y cine
La muerte de David Bowie
Fue la gran pérdida cultural de 2016. Y nada más comenzado el año, ya que el músico británico falleció el 10 de enero. Un cáncer de hígado se llevó prematuramente a Bowie, que había cumplido 69 años dos días antes. Su importancia musical está fuera de toda duda, ya que es el autor de canciones que conoce todo el mundo como Space Oddity, Under Pressure, Changes o Starman. El legado de Bowie, que estuvo desaparecido de los escenarios desde 2004, es muy amplio. Tanto que lanzó su último disco, Blackstar, en octubre de 2015, mientras trabajaba en un nuevo trabajo.
Adiós a Alan Rickman
Tenía una de las mejores voces y una dicción casi perfecta, por lo que estaba considerado como uno de los grandes en cualquier faceta interpretativa. El actor de teatro, conocido por ser el Severus Snape de Harry Potter, falleció el 14 de enero a los 69 años. Le quedaba un mes para cumplir 70 cuando un cáncer de páncreas le causó la muerte. Su último papel fue en la película Eye in the Sky, donde compartía protagonismo con Helen Mirren. Otros de sus papeles míticos fueron el de Sheriff de Nottingham en Robin Hood y el de Hans Gruber en Jungla de Cristal.
El inesperado fallecimiento de Prince
El último concierto del autor de Purple Rain fue el 14 de abril después de cancelar dos actuaciones por una supuesta gripe. El 21 de abril, los medios estadounidenses informaron de que Prince Rogers Nelson había sido hallado muerto en su casa. Su edad (57 años) y que hubiese perdido notoriedad musical motivaron que su desaparición sorprendiese incluso más. Semanas después, se reveló que murió a causa de una sobredosis de fentanilo, un analgésico muy potente.
Leonard Cohen, el último en fallecer
Por ahora, es el hecho luctuoso más reciente que ha conmocionado al mundo de la cultura. El cantautor canadiense ha muerto este 11 de noviembre a los 82 años en Los Ángeles, como ha anunciado su familia a través de Facebook. Como en el caso de David Bowie, había sacado disco poco antes de su muerte, cuando lanzó You Want It Darker en octubre. Entre su legado, canciones históricas como Suzanne, Hallelujah o Chelsea Hotel. Además, puso música un himno de la Resistencia Francesa contra Hitler. Uno de sus últimos gestos fue la carta de despedida que escribió a su musa, Marianne, a la que también dedicó otro de sus temas más conocidos.
