Cataluña vive mañana una huelga general sin apoyo de sindicatos mayoritarios

La huelga general convocada para mañana jueves por el sindicato independentista Intersindical-CSC impactará previsiblemente en el ámbito de la educación y el comercio, mientras que la industria se quedará al margen de un paro que no cuenta con el apoyo de los sindicatos mayoritarios en Cataluña.

Hasta ahora, la convocatoria, que se enmarca en un contexto de movilizaciones para protestar por el juicio del 'procés', ha sido respaldada, desde el ámbito sindical, por USTEC, mayoritario en la educación obligatoria, la CGT y los sindicatos de estudiantes.

La plataforma independentista “Universitats per la República”, que agrupa a varias entidades, ha llamado a participar en la jornada de huelga y a acudir a una manifestación, que arrancará a las 12:30 horas de la plaza Universitat, bajo el lema “21-F. Huelga General. Vaciamos las aulas, llenamos las calles”.

Con el lema “La autodeterminación no es delito. Parémoslo todo”, la Assamblea Nacional Catalana (ANC) anima también a secundar el paro y acudir a la concentración del mediodía y a la que saldrá a las 18:00 horas del Jardinets de Gràcia, al igual que lo han hecho Òmnium Cultural, los CDR y los partidos independentistas.

La huelga cuenta además con el respaldo del Govern, que ha suspendido la agenda política pública de todos los consellers, con la excepción del titular de Trabajo, Chakir el Homrani, responsable del seguimiento del paro, y del de Interior, Miquel Buch, que deberá ocuparse de posibles emergencias y de la seguridad.

La suma de estas voces hace prever un seguimiento del paro más o menos significativo entre los docentes, mientras que la huelga puede impactar en el comercio y los servicios, sobre todo en el centro de Barcelona, como efecto indirecto de las concentraciones.

Por el contrario, las expectativas de seguimiento del paro en la industria son bastantes bajas dado que los sindicatos mayoritarios, con CCOO y UGT a la cabeza, no han apoyado la convocatoria de huelga.

En la planta de automóviles de Seat, el principal centro industrial de Cataluña y que sirve de referencia para tomar el pulso al sector de la industria, se mantendrá la actividad normal y no se han elaborado planes de contingencia.

Pese a ello, la compañía se mantendrá a la expectativa por si se producen cortes de carreteras que puedan dificultar el suministro de piezas, según fuentes sindicales.

Ante este escenario, la Generalitat ha decretado unos servicios mínimos que prevén el funcionamiento del 33 % de los trenes de cercanías y regionales, y del 50 % del metro y el autobús urbano en Barcelona en horas punta y del 20 % en el resto del tramo horario.

En la convocatoria del paro, la Intersindical-SCS justifica la huelga por motivos laborales y reivindica, por ejemplo, la implantación de un salario mínimo catalán de 1.200 euros, mientras que la patronal Foment del Treball ha denunciado las motivaciones políticas de esta convocatoria.