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Condenado un hombre a cuatro años y 11 meses de cárcel por intentar prender fuego a su mujer

Audiencia Provincial Toledo

elDiarioclm.es

La Audiencia Provincial de Toledo ha condenado al hombre que intentó prender fuego a su mujer, con las iniciales V.M, a cuatro años, 11 meses y 29 días de prisión por un delito de homicidio en grado de tentativa, a la que se añade el agravante de parentesco. Así lo señala la sentencia consultada por eldiarioclm.es, en la que también se le imponen las costas del juicio y se le prohíbe la residencia en el mismo lugar que la víctima y la aproximación y comunicación con ella durante 10 años.

La mujer negó este mes los hechos, que sucedieron en la localidad de Corral de Almaguer, asegurando que ni su marido ni amenazó con matarla, ni tampoco quiso hacerle daño. La hija de ambos, también negó que el padre rociase a la mujer con gasolina o que la madre saliese a pedir ayuda, ni tampoco que viese al acusado con una caja de cerillas. La mujer tampoco presentó denuncia por los hechos que se juzgaban.

El acusado, señala la sentencia, había sido detenido en dos ocasiones por delitos de malos tratos, en 2004 y 2007. La hija mayor del matrimonio afirmó, además, que el padre ha pegado “muchas veces” a la madre, además de amenazarla de muerte. “Explícitas son sus revelaciones sobre que 'al final su madre le perdonaba'”. La Audiencia Provincial ha concluido que la víctima ha sufrido malos tratos “reiterados” del marido y que el episodio juzgado es una “conclusión de la situación de violencia impune a la que se ha sometido a la víctima a lo largo de los años”.

La sentencia señala, también, que el Tribunal “no cree” el testimonio de la victima y su hija menor, por ser “incongruentes” y que “eluden” el compromiso de incriminar al padre y al esposo en relación a hechos que se consideran “objetivamente controvertidos y probados”, como son la existencia de gasolina, cerillas y amenazas. Los testigos de los hechos, tres testigos de Jehová, han señalado que la mujer manifestó que el marido la había rociado con gasolina y “quería matarla, no consiguiendo su propósito porque huyó del domicilio”.

En la sentencia se consideran los delitos como homicidio en grado de tentativa debido a la conducta de “deseo de matar” del acusado, al utilizar gasolina lo que tachan de “medio ciertamente letal”, además de que se portase una caja de cerillas. En esta línea, puntualizan que la calificación “adecuada” es la de “tentantiva inadecuada” ya que la mujer finalmente salió “despavorida” del domicilio para refugiarse en la valla.

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