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Las organizaciones agrarias prevén hasta 3 millones de hectolitros menos en la vendimia de 2017

Vendimia en Castilla-La Mancha

Francisca Bravo Miranda

De los 43 millones de hectolitros de vino y mosto que se produjeron en España en la campaña de 2016, más de la mitad venía de Castilla-La Mancha. Específicamente, 23 millones venían de tierras castellano-manchegas. Sin embargo, en esta nueva campaña, que se ha adelantado unas semanas, las previsiones no superan los 20 millones de hectolitros, o, incluso, llegar sólo hasta los 19. El pronóstico viene de organizaciones como la Unión de Pequeños Agricultores o Cooperativas Agroalimentarias de Castilla-La Mancha.

Las primeras variedades en la región se adelantaron a los primeros días de agosto, cuando algunas bodegas manchegas comenzaron a molturar las primeras variedades de uva, según han señalado desde la Denominación de Origen La Mancha, con un adelanto de hasta 20 días para algunas variedades. Se han producido así estampas “poco habituales” para el mes de agosto, lo que no ha resentido la calidad de los productos que presentan una graduación y acidez adecuadas. El adelanto, señalan desde la DO, se debe a las altas temperaturas del final de la primavera y el principio del verano.

Ha sido en Ciudad Real donde más temprano se iniciaron las tareas de recogida de la uva, como en la cooperativa Cristo de la Vega (Socuéllamos) o en Tomelloso, donde las máquinas de Vinícola de Tomelloso se pusieron en marcha el pasado 2 de agosto. Ante esto, se cree que los vinos blancos tendrán “muy buena respuesta” en el tiempo, debido al PH más bajo de la uva. Además, gracias a la ausencia de enfermedades, se ha ido viendo que la uva “que está entrando muy sana”. “Queremos garantizar sus aromas primarios en estas primeras variedades y también buscar un ahorro de coste energético en el control de la temperatura para la fermentación; por eso se recogen de noche”, han apuntado desde la D.O.

“Claramente” a la baja

Antes de iniciarse la campaña, a finales de julio, Cooperativas Agroalimentarias concluyó en su asamblea sectorial que la merma de la nueva campaña de vendimia podía llegar al 10%. “Dependía mucho del transcurso de agosto de si la situación iba a ir al alza o a la baja”, explica Juan Fuentes, portavoz del sector vitivinícola de la organización. “Conforme se está viendo la temperatura actual, se ve claramente que va a ir a la baja. Efectivamente, las viñas tienen menos uva de la que esperábamos y hay menos de lo que esperábamos hace unas semanas”, explica.

Sin embargo, todavía quedan días para que la situación pueda cambiar, y que todavía se debe esperar a que la vendimia “se generalice”, pero calculan que el porcentaje sea un 20% por debajo de la campaña de 2016. Fuentes señala que la manera que tienen los agricultores de hacer frente a este fenómeno es con una evolución de los precios, que deberán subir “en la misma magnitud” que la merma de la cosecha para que las rentas sean las mismas. “Ha llovido poco, las temperaturas han sido muy altas y las olas de calor, continuas. La esperanza que tenemos es que suba el precio para poder mantener la renta del sector”, concluye.

La misma postura muestra Alejandro García-Gasco, rsponsable del sector del vino de la Unión de Pequeños Agricultores tanto en Castilla-La Mancha como a nivel nacional. El profesional explica que las primeras muestras que se han recogido de variedades como Chardonnay, Sauvignon Blanc o Moscatel, las primeras que se han empezado a recoger, ya muestran una merma respecto al 2016. “Hablamos entre 3 y 4 millones menos a nivel regional y en el mismo porcentaje a nivel nacional. Pasaríamos de los 43 a entre 40 o 39 millones de hectolitros”, señala, refiriéndose a la producción tanto de vino como de mosto.

Sin embargo, García-Gasco afirma que la uva presente una calidad “excelente”, ya que no ha habido daños importantes que pudiesen mermar la calidad, sino más bien “todo lo contrario”. Sin embargo, recuerda que ha habido zonas en la región, como La Manchuela, que se han visto afectadas por los daños de pedrisco. Otras zonas de España, como la Ribera de Duero, La Rioja o Galicia, se verán afectadas por las consecuencias de las importantes heladas sufridas en invierno. Al igual que Cooperativas, UPA confía en un “repunte” de los precios en el mismo porcentaje que ha disminuido. “Ya partimos de una campaña escasa, la pasada, que ha tenido un buen funcionamiento en las exportaciones. Hablamos de en torno al millón o millón y medio de hectolitros al mes”, afirma.

Vendimiar sin conocer los precios

Sin embargo, los agricultores se enfrentan a una situación que se ha ido repitiendo los últimos dos años, que es vendimiar la uva sin conocer realmente los precios a los que podrán vender su producto. “Es la gran incertidumbre, no saber como va a resultar el mercado”, señala Alejandro. Si bien consideran que la situación a nivel internacional no ofrece problemas a España, pues los principales compradores como Francia o Italia han tenido daños en producción, no se sabe los precios del producto.

En contra de esta incertidumbre, UPA insiste en que se necesita una mesa de planificación de la producción de campaña, que demandan desde el Gobierno regional. “Estamos ante una campaña digamos normal e incluso reducción a la baja e incluso con datos bajo, por lo que no debe haber ningún problema a la hora del aumento de precios”, afirma. Es lgo que se necesita para que los agricultores puedan amortiguar los gastos de producción. Además, reclaman un control de los contratos de compraventa, “tal y como marca la ley de la cadena agroalimentaria”.

“Llevamos dos campañas con esto y ya tenemos demandadas algunas bodegas fuertes de Castilla-La Mancha debido al cumplimiento de los contratos. Pedimos que sean contundentes con el control de los contratos de plazo de pago”, señala. Para poder un control de los precios, han encargado un estudio de costes de producción para saber cuánto cuesta “realmente” al agricultor la recogida de uva. Para ello, harán 400 encuestas y lograr esta media, que permitirá llevar a cabo un contrato homologado con el que el viticultor pueda demandar su cumplimiento. “No estamos en contra de la industria pero queremos que se cumpla la ley”, explica. “El agricultor que esté en cooperativa no tendrá problema, pero el que no, está indefenso”, concluye.

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