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El camalote figura de momento como especie invasora en la lista que votará Europa

El tramo urbano de Mérida junto al puente Romano, invadido

José L. Aroca

La delegación extremeña que durante un par de días ha hecho campaña en la capital europea, regresó ayer de Bruselas con el camalote incluido en la propuesta de especies exóticas e invasoras, lo que significaría la guerra contra él. Pero hace falta que la lista llegue así a la votación de los organismos europeos dentro de unas semanas, ya que hay países como Alemania o Reino Unido que no la consideran dañina.

La consejera de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio, Begoña García, ha compartido con la plataforma SOS Guadiana la reclamación de que este verdadero ‘chapapote verde’ es un problema para la cuenca del río, y de calibre internacional porque aunque está asentado en 150 kilómetros del cauce extremeño amenaza a Portugal y de hecho representantes de ese país han participado en las reuniones celebradas en Bruselas el martes y ayer.

El camalote, o jacinto de agua, ha cubierto completamente el agua en algunos tramos, especialmente en Medellín y Mérida, amenaza gravemente a los ecosistemas del río, los agricultores de las Vegas Altas del Guadiana están ya preocupados de que atasque tomas y acequias de riego, e inutilice los valiosos arrozales, y negocios ribereños de hostelería van directamente a la ruina si no se acaba con él.

Además la Confederación Hidrográfica del Guadiana se ha mostrado impotente para combatirlo pese a haberse gastado 26 millones de euros hasta el momento.

Catálogo provisional

La Comisión Europea ha redactado una lista provisional de 36 especies de flora y fauna invasoras y exóticas, entre las que ha incluido al camalote, y en principio la aprobación del listado en las instituciones europeas está prevista para el próximo 4 de diciembre aunque esa fecha puede variar.

El también llamado jacinto de agua prospera y se multiplica con alegría en climas suaves como los del sur de España, en este caso el Guadiana, mientras que en el centro y norte de Europa las temperaturas más bajas impiden su crecimiento de manera que está controlado y considerado como planta ornamental, por lo que países como Alemania o Reino Unido intentarán en principio sacarlo de la lista.

Extremadura ha encontrado la comprensión de dirigentes como la andaluza Clara Aguilera, vicepresidenta de la comisión de agricultura y desarrollo rural del Parlamento Europeo, que ha apoyado en estos días, y urgido junto a la consejera extremeña Begoña García, que el Gobierno español luche para que esta planta permanezca en la lista y sea declarada oficialmente enemiga del continente.

Aguilera ha reclamado al Gobierno de Rajoy una actuación de emergencia para lograr fondos contra la plaga, y que promueva la necesidad de incluir esta especie dentro del catálogo de especies invasoras que prepara la Unión Europea (UE).

“Hay que quitar con urgencia el camalote del Guadiana, esto es un incendio que debe apagarse y que supone un grave riesgo para los ecosistemas”, subrayó la parlamentaria.

Que el Gobierno nacional se implique

La representante de la plataforma SOS Guadiana, Susana Cortés, que ha destacado en Bruselas que la planta puede causar la muerte de las especies autóctonas, advierte que la lucha contra la misma “no puede dejarse al azar”, y pide una estrategia tanto a la Confederación del Guadiana como al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.

La eurodiputada Clara Aguilera subraya que la Comisión Europea (CE) “ya ha hecho su trabajo” al incluir el jacinto de agua en el catálogo provisional de especies amenazantes, y solo hace falta ahora que los Estados miembros lo aprueben, por lo que pide a la ministra española de Agricultura, Isabel García Tejerina, que se implique en ello.

El martes los representantes del Ejecutivo extremeño acompañaron a la plataforma SOS Guadiana en varias reuniones en las que participaron el representante del Consejo de Medio Ambiente de la representación permanente de España ante la Unión Europea, Sergio Álvarez, y varios miembros españoles y portugueses de la Comisión de Agricultura y Medio Ambiente y Desarrollo Rural de Parlamento Europeo. Representantes de la Universidad de Extremadura, de comunidades de regantes, y de la Agencia de Medio Ambiente de Portugal también estuvieron.

Ya ayer finalmente se produjo un encuentro con el director general de Medio Ambiente de la Comisión Europea, Daniel Callejo Crespo.

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