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Un olivar ecológico de La Vera consigue crear una isla sin caza dentro de un coto

La finca Elanio en La Vera, enclave sin tiros dentro de un coto social

José L. Aroca

Algún año han tenido que dejar de coger las aceitunas, después de que un cazador disparara en una mañana 500 tiros para coger “un zorzal o ninguno”. En temporada de caza, de octubre a febrero, “no podíamos pasear por la finca”. Así que José Guisado, de Robledillo de la Vera, se enteró de que un reglamento de la Junta podía ayudarle, se acogió a él y ha conseguido la declaración de terreno cinegético libre de caza.

Corre sus riesgos, admite a eldiarioex, de hecho algunos vecinos, aunque informados, “han preferido no hacerlo, por miedo, represalias”.

Prácticamente todos los terrenos son cinegéticos, se puede cazar libremente y por cualquier persona con licencia, pero los mejores están vedados como coto de caza para propietarios y socios. En el caso de esta finca de Robledillo de cinco hectáreas, con una parte en olivar ecológico, Guisado se acogió en su día a ser incluido en el coto social del pueblo.

“Me dijeron que era mejor que cazaran doscientos conocidos, los socios, que cinco mil venidos de cualquier parte de España”.

Pero la situación se volvió insostenible para esta persona, procedente de Madrid y establecido ahora en La Vera, y que es miembro de la junta directiva de la asociación protectora de aves SEO Birdlife.

Le aconsejaron

Se enteró de que un decreto de la Junta, el reglamento de 2016 que regula los terrenos cinegéticos y su gestión, permite dentro de un coto constituirse en enclave prohibido, a condición de que se valle.

En septiembre se acogió al reglamento, pagó una tasa de 36,64 euros, hizo el vallado, y finalmente ha conseguido el permiso, para que “nos respeten la propiedad privada. Cómo es posible que yo no puedo pasear por mi finca en días de caza, era intolerable. No puedes tener una finca, y que te estén cosiendo a tiros. A ellos no les gustaría que entrara nadie en su casa”.

Todos los jueves, sábado y domingo fiestas guardar, de octubre a febrero, “dando tiros”

Después de haberlo conseguido, ya le han pedido información desde Cataluña para promover algo similar al reglamento extremeño, un derecho que allí no existe.

En cualquier caso vallar toda la finca, “es un dinero”, y habrá gente “que no pueda o no quiera gastárselo”.

Tras dar él la noticia, en un tuit le han avisado del problema de los jabalíes

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