Euskadi quiere irse antes a la cama

Primero fue la encuesta del Eustat presentada esta semana que reflejaba la dificultad de cuidar a menores y dependientes por parte de los trabajadores vascos. Después ha sido un informe de la firma Flex en la que se destaca que en Euskadi solo se duerme 6,8 horas, muy por debajo de lo necesario. Y al final, se ha desvelado el posible origen de todos estos problemas: los horarios laborales, la cultura social española y la conciliación son imposibles de cuadrar. O cambiamos de hábitos o será complicado que tengamos tiempo para todo y, por lo tanto, las ojeras seguirán siendo parte del paisaje patrio.

Según desvela el Centro de Prospecciones Sociológicas del País Vasco, dependiente del Gobierno autonómico, aunque el 67% de los vascos se declara satisfecho con su jornada laboral, cuatro de cada diez preferiría entrar y salir antes de su puesto de trabajo. Algo complicado ya que, según el informe 'Aproximación a las actitudes y opiniones relacionadas con los hábitos y horarios', el 62% de los trabajadores de Euskadi no tiene la posibilidad de modificar el horario de llegada y salida a su puesto

Falta de flexibilidad horaria

La mitad de las personas con un trabajo remunerado acaban (o acababan) su jornada laboral antes de las seis de la tarde; el 18%, entre las seis y las ocho; y el 15%, entre las ocho y las doce. La encuesta se ha realizado a personas que están trabajando o que lo han hecho con anterioridad. Seis de cada diez entrevistados no tienen libertad para decidir su jornada de trabajo, ya que el horario de salida y llegada al trabajo los marca la empresa, sin posibilidades de cambio por su parte. Dentro de ciertos límites, tiene libertad de decidir el horario de entrada y salida del trabajo el 29% de los encuestados. El diez por ciento es libre de decidir cuándo iniciar y terminar su jornada.

Una tercera parte de las personas que están trabajando (o estando parados han trabajado con anterioridad) querría cambiar su tipo de jornada laboral, la inmensa mayoría de ellos (el 80%) para trabajar en jornada continua. Aunque más de la mitad opina que ese cambio le resultaría muy o bastante difícil a la empresa teniendo en cuenta el tipo de trabajo que se realiza, otra parte, el 52% opina que adaptar la jornada laboral no supondría perjuicio económico para la empresa. De hecho, el doce por ciento consideran que la situación económica de la empresa mejoraría con horarios más flexibles.

En Gipuzkoa se cena antes

El estudio indica que más de seis de cada diez ciudadanos vascos se acuestan después de las doce de la noche. En el resto de España, el 34% va a dormir entre las once y las doce, y el 40% después de la medianoche. Los vascos también se levantan antes que el resto de ciudadanos españoles. El 65 por ciento se levanta antes de las ocho, mientras que en el resto del país son el 57 por ciento los que se levantan a esa hora.

Aunque la mayoría cree dormir las horas necesarias, el 43% piensa que duerme menos de lo que debería. Esa misma sensación la tiene el 32% de los españoles.

El informe indica que el 46% cena entre las nueve y las diez de la noche. Las diferencias entre territorios son considerables, ya que en Gipuzkoa se cena antes que en Álava y Bizkaia. El 50% de los alaveses y el 49% de los vizcaínos cenan en ese tramo horario, mientras que en Gipuzkoa, son un 39%.

La división de opiniones es menor en cuanto al horario televisivo. El 64% de la población se muestra a favor de que se adelante el 'prime-time', y tan sólo el 17% estaría a favor de mantenerlo como en la actualidad.

El cansancio afecta más a las mujeres

Al final del día, el 40% de la población termina muy cansada de su actividad siempre o frecuentemente, y el 16% todavía sigue realizando tareas del hogar cuando debería estar en la cama.

Estos porcentajes son más elevados en el caso de las mujeres con hijos menores de 15 años, entre las que el 66% termina muy cansada al final del día y el 39%, sigue realizando tareas del hogar cuando debería estar acostada. También entre los hombres con hijos esos porcentajes son algo más elevados que entre quienes no tienen hijos, pero menores que en el caso de las mujeres.

Adoptar al huso horario de Greenwich

Las opiniones se encuentran divididas en cuanto a la posibilidad adaptar los horarios a modelos europeos. Algo más de la mitad de la población prefiere mantener los horarios como en la actualidad a adaptarlos a costumbres de otros países europeos en los que se come, se sale de trabajar y se cena antes. El 41% estaría a favor de adelantar los horarios equiparándolos a esos países europeos.

Las opiniones se encuentran igual de dividas en cuanto a la necesidad de cambiar el huso horario de Euskadi haciéndolo coincidir con el meridiano de Greenwich (uso del Reino Unido o Portugal), es decir, adelantar los relojes una hora para aprovechar mejor las horas de sol. El 43% está a favor de cambiarlo y el 44 prefiere mantenerlo como en la actualidad.