El cine como defensor de los derechos humanos
El cine no solo es ocio, sino también una pantalla a otros continentes, un altavoz reivindicativo, una oportunidad de escuchar otras historias e, incluso de vivirlas. Con el objetivo de aprovechar esta sensibilidad, nació hace ya diez ediciones la Muestra de Cine y Derechos Humanos de Pamplona. La cita, que se celebra desde este lunes y hasta este viernes, acoge proyecciones de otro tipo de cine, menos comercial y más social, que pretende acercar al público temas como la precariedad laboral, la emigración, la violencia de género o el derecho a la salud. Y, en esta edición, la X, tiene también un papel importante África.
Así, por ejemplo entre el martes y el jueves, la programación incluye por primera vez unas sesiones educativas matinales (a las 09:30 horas en los cines Golem Baiona), dirigidas a alumnado de institutos de Enseñanza Media, durante las que se proyectarán documentales (de pequeñas productoras que fomentan rodajes en el continente africano) sobre temas como la mutilación genital femenina en África, el rechazo a personas albinas en Tanzania y la discriminación de gays y, en general, el colectivo LGTBI en Uganda y África. La última sesión, la del jueves 13, se centrará por otro lado en la memoria histórica en España.
Esta es una de las actividades novedosas que integran esta edición, organizada por entidades como el Instituto de Promoción de Estudios Sociales IPES Elkartea, los cines Golem, Nosolofilms, Amnistía Internacional y la Fundación Felipe Rinaldi. Los objetivos de la cita son los mismos que en anteriores ediciones: mostrar a través del cine otras realidades y potenciar el compromiso con los derechos humanos. “Al final, esta muestra es un granito de arena más para agitar conciencias. Cada vez hay más citas de este tipo, como en Madrid y San Sebastián, pero en este caso hemos intentado cerrar un programa pensando en el público de Pamplona”, explican desde la organización, en IPES.
Así, las películas se seleccionan por el interés del tema tratado, por su actualidad y por el hecho de que algunas son estrenos en la ciudad, difíciles de ver de no ser por un evento como este. Cada jornada de esta semana hasta el viernes, y siempre a las 20:00 horas en Golem Baiona y por 4 euros la entrada, se podrá ver una de estas películas. Son: En tierra extraña, de Icíar Bollaín; Difret, de Zeresnay Berhane Mehari; Tigers, de Danis Tanovic; Timbuktu, de Abderrahmane Sissako; y, por último, en la última sesión se proyectarán los documentales Baadaye, Lake Victoria Children, Un día de campo, Punishment Island y Mama Adèle. Cada una de las jornadas contará con un experto para abordar temas relacionados con la película, desde los documentalistas y directores responsables de las cintas a una socióloga, una escritora y activista, una farmacéutica que coopera con Médicos del Mundo y un antropólogo.
En este caso, y a diferencia de la Muestra de Cine y Mujer, también organizada por IPES pero en junio, la organización ya ha recibido la garantía de que recibirá una ayuda institucional, tanto del Gobierno Foral como del Ayuntamiento de Pamplona por la preparación de este ciclo. En el caso de Cine y Mujer, la confirmación se produjo finalmente la semana pasada.
