El incierto camino de la confluencia: Ahora en Común se organiza en Andalucía
El llamamiento a la confluencia de Ahora en Común ha provocado que surjan varios nodos locales de apoyo en Andalucía. Sin saber muy bien en qué se traducirán las horas de asambleas y discusiones, la asamblea malagueña de Ahora en Común se reunió el lunes por segunda vez y prepara una especie de encuentro constitutivo para el próximo sábado: allí se esbozará incluso un eje programático, unos puntos que les identifiquen, según se acordó el lunes. Lo que quieren está algo más claro: una candidatura de confluencia a la que también se incorpore Podemos. Tratan de recabar apoyos en toda la provincia.
El lunes por la tarde, unas 60 personas participaron en una asamblea en el colegio Miraflores de Los Ángeles. Por allí pasó una televisión nacional interesada por la consolidación en Málaga del apoyo a la candidatura de unidad. Ni ellos sabían muy bien el porqué del protagonismo a nivel estatal, pero el grupo marcha avanzado con respecto a la constitución en otras ciudades.
En el origen de Ahora en Común Málaga está, según aseguran varias fuentes, el descontento de algunos militantes de Podemos en la ciudad con la evolución del partido y el proceso de primarias. Integrantes del círculo de Málaga Oeste y de Podemos Costa del Sol han participado en las asambleas y han promocionado los eventos en las redes sociales. Podemos Málaga ha aclarado en Twitter que como organización “no tiene nada que ver con este movimiento ni con estas reuniones”. También ha anunciado que de la reunión del consejo ciudadano de este miércoles podría salir un posicionamiento. Cuadros de Izquierda Unida y dirigentes de Equo, como Carmen Molina (coportavoz regional) participaron activamente en la asamblea del lunes, siempre a título individual.
Además de en Málaga, la iniciativa intenta abrirse camino en ciudades como Granada y Jaén. José Moreno participa en la iniciativa granadina y es militante de Podemos. “No entiendo esto como algo para hacer frente a Podemos”. Cree que Podemos aportaría hoy la vinculación con el ciudadano no tan activo, y Ahora en Común, con el más politizado y militante: “Se necesitan uno a otro”. Sito Ureña también fue uno de los impulsores de Podemos en Jaén, y cree que el partido ha quedado reducido en la ciudad a “su consejo y poco más”. Prevé un “batacazo” si no hay unión, entre otros motivos por la circunscripción electoral provincial y el fuerte arraigo del PSOE en el ámbito rural.
Los obstáculos para el movimiento
La consolidación local del movimiento deberá superar muchos escollos. El primero, el de los tiempos: la movilización se complica en verano y el calor sofocante en pequeños locales de reunión no es un problema menor. La primera asamblea malagueña desbordó la capacidad de la sede local de Equo. Más importante es cómo cicatricen las heridas de los procesos municipalistas. La ruptura de Ganemos en dos sectores (Málaga Ahora, apoyado por La Invisible, Equo y miembros de Podemos y Málaga para la Gente, apoyado por IU) aún escuece. El problema es similar en otras ciudades andaluzas. En Málaga pesa el hecho de que una candidatura conjunta hubiese servido para desalojar al PP del ayuntamiento (Málaga Ahora obtuvo cuatro concejales y Málaga para la Gente, dos).
Hasta tal punto existe el temor a repetir errores que en la asamblea malagueña del lunes se planteó contar con mediadores o “facilitadores” profesionales que arreglen posibles encontronazos. En la mente de casi todos está lo que ocurrió en noviembre en Ganemos Málaga, con las acusaciones cruzadas de “apareteo” y de “poner la alfombra roja a Podemos”. “Todos cometimos errores, pero ahora hay que sumar”, explica Pedro Aceituno, uno de los promotores de la iniciativa. En la ruptura, él quedó del lado de Málaga para la Gente. Aclara que en las asambleas participan también personas que apoyaron la candidatura de Málaga Ahora.
Y luego está el papel determinante de Podemos. Ahora en Común se plantea como una especie de lobby por la confluencia. Todos repiten la tesis: sólo con una candidatura de confluencia es posible optar al gobierno. “Podemos solo no puede y nosotros solos no podemos”, insisten, haciendo suya una viñeta que circula en la red. Somos “una especie de pepito grillo para la unidad”, dice la web del movimiento. Según un asistente a la asamblea de Málaga, “Pablo Iglesias tiene muy difícil decir que esto es IU porque hay gente suya, de Equo, independientes… Y muchos cargos de Podemos han firmado el manifiesto”. Sin embargo, muchos admiten que, la promueva o no, esta iniciativa puede verse como la “tabla de salvación” de IU.
Ayer mismo, Sergio Pascual, secretario de Organización de Podemos, volvió a ser claro sobre Ahora en Común: “Esta plataforma es extremadamente joven y no encaja con nuestro modelo de alianzas”. ¿Y si Podemos finalmente no quiere, como viene insistiendo por activa y por pasiva? Los impulsores de la confluencia en Andalucía se encogen de hombros, pero admiten que sin Podemos tendrán muy difícil consolidarse: “Alguien me dijo que si no hay unidad pondría las dos papeletas en un sobre…”, cuenta Aceituno. “Al menos ya hemos conseguido que se hayan movido de las posiciones iniciales”, dicen muchos.
Los otros movimientos para explorar la “unidad popular”
Mientras, Podemos celebra sus primarias y ha surgido una red de candidaturas municipalistas de Andalucía (Red de Municipios por el Cambio) en la que participan concejales de Por Cádiz Sí Se Puede, Ganemos Córdoba, Participa Sevilla, Jaén en Común y Málaga Ahora. El manifiesto de esta red llama a “tener voz en el debate abierto en el país sobre cómo afrontar el proceso de unidad popular”. Frente Cívico Somos Mayoría también abogó en un comunicado por la “unidad popular” no condicionada por la “urgencia” electoral.
“Yo no sé qué va a salir, pero sé que si no hacemos nada no saldrá nada”, contaba un asistente a la asamblea de Málaga, en la que se crearon tres grupos de trabajo: extensión, comunicación y programa. Algunos admitían que el proceso está aún “muy verde”, pero confían en contar con la fuerza suficiente como para que Podemos se una: “Si no, al final nos haremos daño”.