Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
La guerra entre PSOE y PP bloquea el acuerdo entre el Gobierno y las comunidades
Un año en derrocar a Al Asad: el líder del asalto militar sirio detalla la operación
Opinión - Un tercio de los españoles no entienden lo que leen. Por Rosa María Artal

Cada pasaje de los barcos turísticos le costó 6,94 euros al Ayuntamiento de Zaragoza

El Ayuntamiento decidió suspender el servicio de los barcos turísticos

Eduardo Bayona

Zaragoza —

Al Ayuntamiento de Zaragoza le ha salido a 6,94 euros cada pasajero que útilizó los barcos que, entre 2009 y 2015, surcaron el tramo urbano del Ebro. Este coste no incluye el IVA ni la parte proporcional de los 20 millones que costó el azud de Vadorrey, cuya finalidad principal era generar una lámina estable de agua que asegurara un “calado suficiente en verano para uso lúdico y deportivo”, además de habilitar una pasarela que comunicara Las Fuentes con la margen izquierda.

El equipo de gobierno municipal de Zaragoza en Común (ZeC) decidió suprimir este servicio, por su alto coste y por sus efectos en el río, a partir de este verano, con la rescisión definitiva del contrato con la empresa filial del parque de atracciones de la capital aragonesa que explotaba los paseos fluviales desde 2012. La rescisión incluyó una indemnización de 300.000 euros para esa empresa, que ha provocado críticas de algunas formaciones de la oposición.

En esos siete años, según los datos a los que ha tenido acceso eldiario.es/Aragon, el Consistorio se gastó 488.927 euros en adecuar el río para que pudieran navegar unos barcos que fueron utilizados por 70.391 personas. La inversión media anual se situó en 69.846 euros y el promedio de usuarios en 10.133.

El billete superaría los 8 euros con IVA

La imputación del IVA elevaría a 8,39 euros el coste de cada billete para las arcas municipales en esos siete años. El Ayuntamiento carece de datos sobre los costes del mantenimiento del río en el primer año que funcionaron los barcos, el 2008, cuando fueron utilizados por unas 20.000 personas.

El principal gasto de mantenimiento lo constituyeron los dragados: 76.012 euros en 2009, 40.500 al año siguiente, 10.588 más 9.325 para una batimetría en 2011, 9.600 por un trabajo similar más 9.428 para retirar algas en 2012, otros 26.350 un año más tarde, 2.978 en el estudio del lecho del río en 2014 y 22.848 en limpieza y 2.900 en la última batimetría en el último ejercicio en el que las embarcaciones surcaron el tramo urbano del Ebro.

Los mayores costes de mantenimiento se produjeron en los dos primeros años, en los que ascendieron a 295.828 euros, IVA aparte.

Oposición ecologista desde el principio

Los paseos fluviales contaron con la oposición de las organizaciones ecologistas desde que se conoció el proyecto en vísperas de la Expo, al considerar que ese modelo no era aconsejable en un río torrencial como el Ebro. Alertaron de su alto coste y de su inviabilidad económica, ya que las crecidas que el cauce registra cada año provocan importantes arrastres de tierras que se ven retenidas por el azud, lo que requería que el lecho fuera acondicionado antes del inicio de cada campaña estival.

Por otro lado, según los datos que maneja el Consistorio, el número de usuarios experimentó un notorio desplome tras el éxito inicial, ya que pasó de los alrededor de 20.000 pasajeros de 2008 a solo 10.020 al año siguiente, para perder casi 4.000 más en 2010 y situarse en 6.839.

Este descenso en los años iniciales de la crisis vino seguido de un repunte iniciado en 2011, cuando los barcos fueron utilizados por 8.225 personas. Las cifras de pasajeros mantuvieron, con la excepción del descenso de 2012 -7.252-, una tendencia constante al alza en los tres años siguientes, en los que los registros fueron, respectivamente, de 10.523, 12.620 y 14.828 usuarios.

Etiquetas
stats