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La boxeadora gitana Sara Montoya salta del ring a la gran pantalla para romper techos de cristal y defender la igualdad

Sara Montoya se interpreta a sí misma en la película sobre su vida y su trayectoria profesional.

Pilar Campo

Oviedo —

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Sara Montoya nunca se puso límites. Cuando vio por primera vez a su hermano menor Manu coger los guantes de boxeo supo que su meta era seguir sus pasos profesionalmente. Ser mujer y gitana no fueron para ella un impedimento para subirse a un ring. Se preparó a conciencia y con gran fuerza de voluntad, esfuerzo y sobre todo una gran pasión por el mundo pugilístico —tradicionalmente vinculado a los hombres– rompió muchos techos de cristal. Ahora se estrena como actriz en la gran pantalla interpretando su propia historia.

El director y guionista Emilio Ruiz Barrachina, ganador del Festival de Cine de Nueva York con su película Tristesse, vio desde un principio que su vida era el guion perfecto para su película “Golpe a golpe” que este miércoles, día 20, se estrena en el Cine Capitol, de Madrid, a las siete y media de la tarde.

En Asturias, la película se verá por primera vez en el Auditorio del Centro Niemeyer de Avilés el 13 de abril, a las ocho de la tarde, coincidiendo con la semana de actos del día del Pueblo Gitano que se celebra el día 8 de abril.

Ha sido rodada íntegramente en los concejos asturianos de Avilés –donde nació y trabaja Sara–, Oviedo, Grado y Salas. Está grabada en exteriores e interiores con escenas en el gimnasio donde ejerce su profesión de entrenadora y en su domicilio.

Su propia familia forma parte del elenco de la película que ha sido calificada por el Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA) del Ministerio de Cultura con el distintivo de “Especialmente recomendada para el fomento de la igualdad de género”.

La propuesta cinematográfica

Emilio Ruiz y Sara Montoya atienden a elDiario.es Asturias desde el Centro Niemeyer de Avilés, donde este lunes se ha presentado oficialmente en una rueda de prensa a la que ambos han acudido. Al acto han asistido el director general de Acción Cultural y Normalización Llingüística del Principado, Antón García, la vicepresidenta del Patronato de la Fundación Niemeyer y alcaldesa de Avilés, Mariví Monteserín, la directora de Antena en Radiotelevisión del Principado de Asturias, Lucía Herrera, el mediador de la Fundación Secretariado Gitano, José Manuel Jiménez, y el director del Centro Niemeyer, Carlos Cuadros.

Emilio Ruiz se sintió cautivado por la forma de expresarse de Sara, a la que vio por primera vez en un informativo de televisión con motivo de una reunión de la Asociación de Mujeres Profesionales del Deporte. Le gustó mucho “lo que dijo y cómo lo dijo”, asegura, y fue tan buena su impresión que no dudó en contactar con ella. Le propuso contar para el cine su trayectoria vital y profesional.

Ella aceptó la propuesta porque, según ella misma reconoce, es la forma de demostrar que “a pesar de ser mujer y gitana nosotras también podemos seguir adelante y estar en cualquier lado: estudiar, trabajar y hacer lo mismo que las demás mujeres”.

Ni actores, ni actrices profesionales

Al principio, el director no tenía muy claro si hacer un documental o un largometraje. Explica que los personajes son reales y no son ni actores, ni actrices profesionales. No hablan a la cámara, son escenas que les ha ocurrido en su día a día.

El balance con Sara en su propio papel protagonista ha sido muy bueno: “Sara es una actriz natural muy buena”, corrobora Emilio que avanza que la película ya ha sido seleccionada para el festival de Nueva York que se celebrará a finales de año, aunque confía en que antes de esa fecha consiga sumar su selección en otros certámenes.

Hace un año empezaron a rodar, adaptando el rodaje a las fechas de celebración real de las veladas. Tras el estreno, este miércoles en Madrid en el Cine Capitol, quedará programada en varias salas de cine de la capital española.

La fecha elegida para su proyección en Asturias, el 13 de abril, no fue casualidad, ni fue elegida por azar. Quisieron que coincidiera con la semana de los actos en conmemoración del día del Pueblo Gitano. No en vano, Sara se muestra muy orgullosa de su etnia y quiere desterrar falsos mitos sobre el colectivo gitano. A continuación reproducimos este tráiler de 'Golpe a golpe'.

“El boxeo es lo mío”, responde rápida y sin pensar dos veces la que fuera subcampeona de España de Clubs cuando se le pregunta si cambiaría ahora sus entrenamientos y su trabajo como monitora pugilística por el cine. Para Sara, la experiencia bajo las cámaras ha sido muy satisfactoria. El equipo la hizo sentir “muy cómoda” y como se trataba de su vida y su familia tampoco tuvo que memorizar ningún guion.

Lleva con orgullo pertenecer a la etnia gitana y, especialmente, aspira a lograr que a través del trabajo de muchas mujeres como ella se puedan desterrar falsos mitos sobre el colectivo.

“Está claro que el ser gitana despierta más interés en la prensa”, opina al constatar la expectación mediática. Opina que formar parte del colectivo gitano junto al deporte que practica son los que dos hechos que marcan un cambio.

Siempre se dice que el mundo gitano es muy machista, que no avanzamos y es al revés. No sé si soy un referente porque esa es una palabra muy grande. Soy una persona que a pesar de las adversidades ha sabido seguir adelante y luchar por lo que quería

Sara Montoya Boxeadora

“Siempre se dice que el mundo gitano es muy machista. Se cree que no avanzamos y es al revés. Y eso creo que es lo que le llamó la atención a Emilio (el director). Es lo que me dio visibilidad y atracción a mi historia”, ratifica.

Actualmente Sara da clases a una treintena de alumnos y alumnas de todas las edades. Da muestras de ser una mujer muy humilde porque cuando se le pregunta si se siente un referente para muchas niñas que aspiran a seguir su ejemplo, ella contesta: “un referente es una palabra muy grande”.

Por eso ella prefiere pensar que su alumnado percibe en ella a una persona que “a pesar de las adversidades ha sabido seguir adelante y luchar por lo que quería. Y quizá sí se pueden fijar un poco en mí”.

“Al principio fue un poco boom porque el boxeo es mayoritariamente de hombres, pero luego viendo que es un deporte como otro cualquiera me apoyaron y todas las adversidades pasaron”, relata sobre cómo su entorno más cercano reaccionó en sus inicios en el mundo pugilístico.

Su hermano Manu, al que veía evolucionar en el boxeo, está muy contento del camino que ha seguido Sara. Ella misma comenta que es un deporte que además les ha unido aún más.

“Mi hermano está muy contento porque es un deporte que los dos amamos. Además -continúa- le ha gustado mucho que tenga esa visibilidad porque tampoco es un deporte que está muy visible”.

Manu también la aconseja y al compartir la misma pasión entrenan juntos aunque ya con el paso de los años Sara tiene que tener más cuidado con él porque ya no es el niño que era.

“De edad soy yo mayor, pero él ya me saca una cabeza y tengo que tener más cuidado”, dice entre risas.

Actualmente ya no compite y se centra especialmente en su trabajo como entrenadora. Recuerda que cuando competía lo más duro era la preparación, con los entrenamientos de fuerza, tácticos y prácticos de boxeo, por la dureza que implica tanto física como mentalmente.

También se ha centrado en su formación para continuar avanzando. Tiene su título con la Federación Española de Boxeo y ahora quiere seguir sumando.

La visibilidad de las mujeres en el deporte

Cada día hay más mujeres en el mundo del boxeo y espera que la gijonesa Laura Fuertes que ha hecho historia al convertirse en la primera boxeadora española que logra la clasificación para unos Juegos Olímpicos tras sellar su pasaporte para París 2024 al acceder a las semifinales de los Juegos Europeos de Cracovia sirva para  dar aún más visibilidad a las mujeres en este deporte.

De momento, Sara no se plantea cambiar los guantes de boxeo por una prometedora carrera cinematográfica, aunque, como ella misma indica, nunca se sabe.

“Yo nunca cierro puertas. Ahora estoy muy cómoda en mi gimnasio y con mi boxeo, pero nunca se sabe”, contesta. Sin descartar cualquier opción que le depare el futuro, actualmente ya es campeona en superar muros y adversidades, en romper techos de cristal, por conseguir la igualdad siendo mujer y gitana.

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