El Gobierno de Asturias aprobará en julio la reforma del IRPF que subirá el tipo autonómico a las rentas muy altas

El Gobierno del Principado de Asturias aprobará este mes de julio en su Consejo de Gobierno la propuesta de reforma del Impuesto de la Renta para las Personas Física (IRPF) en el tramo autonómico que subirá los beneficios fiscales para las rentas medianas y bajas y subirá el tipo para las rentas muy altas.

Así lo ha anunciado el portavoz y consejero de Hacienda, Justicia y Asuntos Europeos, Guillermo Peláez, en la rueda de prensa de este lunes tras la reunión del Ejecutivo de coalición de PSOE-IU que ha presidido la vicepresidenta Gimena Llamedo, ante la baja por enfermedad del presidente Adrián Barbón.

Peláez ha detallado algunos de los puntos principales que incluirá la reforma, que según sus cálculos “facilitará que 8 de cada 10 contribuyentes ahorren al menos 119 euros al año”. El Gobierno progresista asturiano ha diseñado unas modificaciones que suponen que las rentas más favorecidas sean las inferiores o iguales a los 35.000 euros.

Además se neutralizará cualquier beneficio fiscal para las rentas superiores a los 55.000 euros, “que no pagarán ni más ni menos tras la reforma”. Las que sí pagarán más son las rentas muy altas ya que el tipo autonómico pasará del 25,5% al 26% para quienes ganen más de 175.000 euros al año. Esta subida, señala el Gobierno, se realiza para avanzar en la “justicia fiscal”.

Datos 2023

El sistema de deducciones autonómicas en el impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF) alcanzaron en Asturias los 54,1 millones de euros en 2023 y beneficiaron a casi 106.000 asturianos, detalló el consejero y portavoz, que cree que esas cifras consolidan las deducciones de la vía fiscal asturiana como las “más potentes de toda España”, tanto en función de los declarantes como de los habitantes.

En la campaña de 2023, los beneficios fiscales crecieron 20 millones respecto al ejercicio anterior y el número de declaraciones individuales que se acogieron a las deducciones pasó de 83.000 a 87.853, mientras que las conjuntas ascendieron a 17.500.

En 2023, la principal novedad fue la entrada en vigor de la consideración de familias numerosas, a efectos fiscales, de los hogares con dos hijos, lo que permitió triplicar el número de beneficiarios, que alcanzaron los 23.924 y que dejaron de pagar cerca de 15 millones de euros en el IRPF. Las deducciones de apoyo a la familia ascendieron a 34,5 millones de euros, si se tienen en cuenta las aplicadas por el cuidado de hijos y familias numerosas, mientras que las relativas a la vivienda sumaron 13,5 millones.

Peláez indicó que el total de deducciones se ajustan a las previsiones de 54 millones de euros que había hecho el Gobierno y que los cálculos de cara a la campaña de la renta que acaba de finalizar, correspondiente a 2024, es que los beneficios fiscales alcancen a 120.000 contribuyentes y que éstos dejen de pagar unos 70 millones.

Esta cuantía se alcanzará por la entrada en vigor de una nueva deducción sobre los gastos vitales de personas de hasta 35 años, pionera a nivel nacional, o en la mejora en la desgravación por el cuidado de menores de 25, que en el caso del primer hijo ha pasado de 300 a 500 euros.