El Lenovo Tenerife busca su quinta alegría del curso frente al colista

El Lenovo Tenerife recibe este sábado al Zunder Palencia con el objetivo de sumar su quinta victoria liguera (Santiago Martín | 19:45 h.c. | M+ Deportes 3 -- Dial 65).

No se fía el grupo de Txus Vidorreta de la situación clasificatoria de un rival, que a pesar del balance acumulado hasta la fecha (1/8), ha estado en partido en cada jornada hasta bien entrado el último cuarto. Sin Jaime Fernández, que sufre una lesión muscular en el bíceps femoral de la pierna izquierda y con Elgin Cook, con molestias en la rodilla izquierda y casi descartado, los aurinegros intentarán hacerse fuertes en casa e imponer sus señas de identidad.

La solidez del bloque atrás, especialmente para minimizar las prestaciones de los manejadores visitantes; el criterio para atacar con cabeza y la energía para ir con todo a la batalla del rebote, junto al colmillo necesario para castigar los errores del adversario, volverán a ser claves para aspirar con argumentos al triunfo.

Enfrente, los tinerfeños se toparán con un Zunder Palencia que lleva tiempo haciendo méritos para acabar de convertir las buenas sensaciones en más triunfos y al que su condición de recién ascendido e inexperiencia les ha costado más de un partido (llegaron a tener al Barça contra las cuerdas para luego caer en la prórroga).

Dirigido por el ex aurinegro Marco Justo, que afronta su primera experiencia como primer entrenador ACB, tras diez años en el club tinerfeño, el equipo morado, que cuenta con la baja de larga duración del también ex canarista Iván Cruz, aglutina un roster con jugadores interesantes, incluidos varios generadores muy peligrosos en el perímetro a poco que cojan confianza y una rotación interior con muchos centímetros (son terceros en tapones de la liga).

La explosividad de Brandon Brown, verdugo insular en las semifinales de la pasada BCL, a su paso por el Hapoel Jerusalem; el talento del joven holandés Van der Vuurst; el oficio de Vitor Benite; la buena mano de Yannick Franke o el liderazgo de Chumi Ortega, su hombre franquicia por excelencia; junto al físico y versatilidad de Ndiaye o Whittington, sustituto reciente de Tanner Leissner al cuatro; y un juego interior liderado por Haarms y Pasecniks, serán algunos de los aspectos a contrarrestar.