La ceniza del volcán tiñe de negro la emblemática 'Cascada de Colores' de La Caldera
La ceniza del volcán de Cumbre Vieja, en frenética actividad desde el pasado 19 de septiembre, también ha teñido de negro la emblemática Cascada de Colores de La Caldera de Taburiente. El caudal del singular caidero del Parque Nacional de La Palma, al bajar mezclado con el polvo gris descargado por el penacho emitido por la erupción de Cumbre Vieja en el entorno, ha enlutado la llamativa mini catarata del principal espacio protegido de la Isla.
El acceso al Parque Nacional, desde que se inició la crisis volcánica, está cerrado al público.
La Cascada de Colores se localiza a unos 500 metros del cruce con el Barranco del Almendro Amargo. Se formó tras una construcción que se hizo en los años 60 del pasado siglo para retener el agua. Posteriormente, en el 2003, fue reconstruida por el Parque Nacional.
El recurso hídrico de este atractivo caidero procede de varios nacientes, situados a dos kilómetros aguas arriba, en la confluencia de los barrancos de Rivanceras y Limonero.
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