Clavijo también miente con el horario lectivo de los docentes: la medida está en los presupuestos de 2019
En el tiempo de descuento previo a las elecciones, el presidente de Canarias, Fernando Clavijo (CC), ha anunciado otra medida que prevé financiar gracias al superávit de la comunidad autónoma; reducir la jornada lectiva al profesorado a 18 horas. Una decisión que permitirá contratar más docentes, pero que ya estaba contemplada en los Presupuestos Generales de la comunidad autónoma para 2019, a pesar de que se proclame como un éxito nuevo.
Según la disposición vigésimo sexta de los presupuestos, estaba previsto que para el curso escolar 2019-2020 entrara en vigor la reducción de la jornada laboral de los docentes, una reivindicación del sector y por la que se han llegado a manifestar en diversas ocasiones. Los presupuestos condicionaban esta medida a que la comunidad autónoma pudiera incrementar el gasto no financiero durante el ejercicio 2019 hasta el límite del equilibrio estructural, así como a que sea sostenible en los escenarios presupuestarios futuros “no comprometiendo el cumplimiento de los objetivos de estabilidad, regla de gasto y deuda pública, sin perjuicio de lo legislado en normativa de carácter básico”.
Sin embargo, la reducción horaria ya se ha empezado a aplicar en el sector de la Sanidad. De hecho, desde este mes de mayo los trabajadores del Servicio Canario de Salud han recuperado las 35 horas semanales, un derecho que perdieron en el año 2012 por la crisis económica.
En los presupuestos de la comunidad autónoma, también se recoge que “si se autorizara el incremento del gasto no financiero computable, el aumento del gasto educativo se producirá en cuantía que permita cumplir el objetivo del 4% de gasto público sobre el PIB nominal”. Un punto que ha sido recordado por la plataforma 'Por el 5% en Educación' (formada por profesionales del sector, miembros de sindicatos y ciudadanía en general) porque considera “insuficiente” y “electoralista” el anuncio sobre el destino del superávit a Educación.
Para el colectivo, si se atiende a esta disposición, se exige incrementar el actual presupuesto en 174 millones para llegar al 4% del PIB, tal y como marca la ley canaria de Educación. Sin embargo, “se vende como gran conquista el incremento de 63,7 millones de euros del gasto educativo que se dedicará a contratar 1.254 profesores de Secundaria para reducir a 18 horas el horario lectivo, la reivindicación más reiterada del profesorado y de los sindicatos”.
No es la única gran medida anunciada por el presidente a pocos días de las elecciones. También con el superávit ha asegurado que eliminará el copago farmacéutico a los pensionistas con rentas inferiores a 18.000 euros. Lo hace sin dictamen del Consejo Consultivo, a pesar de que se trata de una norma básica del Estado y sin expediente ni informes jurídicos que lo avalen. Un decreto, que de momento, es solo eso, un anuncio inexistente que ni siquiera ha sido publicado en el BOC. Clavijo asegura que en lo único que podrá afectar este uso del superávit es en que se incumpla la regla de gasto.
Desde la oposición, el socialista Iñaki Lavandera considera que lo que pretende Clavijo es seguir con el clima de confrontación con el Estado porque ve fuerte al PSOE de cara a las elecciones autonómicas. Recuerda que la propia CC votó en contra de los presupuestos de Pedro Sánchez que contemplaban la eliminación del copago y que era una de las medidas que los socialistas ya llevaban en su programa electoral. Lo mismo ocurre con la reducción de la jornada lectiva, que ya aparecía recogida en en las cuentas de la comunidad autónoma para este año.
Esther González, de Nueva Canarias, ya ha advertido de que si el presidente pretende utilizar de esa forma el superávit estaría anunciando que va a prevaricar, ya que ese dinero solo puede utilizado para amortizar deuda o para inversiones financieramente sostenibles, según la ley. Además, para la formación nacionalista, este uso del superávit es un nuevo “farol” de Clavijo, quien además ha tenido otras oportunidades de destinar recursos adicionales a los servicios sociales y no lo ha hecho, como cuando prefirió gastarse el dinero de IGTE en “aceras y farolas” a través del llamado Fondo de Desarrollo de Canarias (Fdcan).