Cantabria ha contabilizado 56.000 contagios en la sexta ola, que está “claramente” en descenso

La curva de contagios de coronavirus “pinta claramente una bajada” en todas las áreas sanitarias de Cantabria, que ha contabilizado en esta sexta ola -que comenzó a crecer en torno al mes de noviembre- unos 56.000 contagios.

A ellos se suman otros muchos que no se han detectado y que se han podido dar en personas asintomáticas o que no se han realizado la prueba de detección, “por lo que la dimensión es muy grande y todavía existe el riesgo de contagio”.

Así lo ha dicho este lunes en declaraciones a RNE recogidas por Europa Press el director general de Salud Pública, Reinhard Wallmann, quien ha señalado que están en descenso todos los indicadores de transmisión comunitaria en Cantabria, lo que va “en consonancia” con la tendencia de otras comunidades autónomas y con la de España en general.

Sin embargo, este descenso todavía no está teniendo repercusión en la presión hospitalaria, que sigue muy alta, con 241 ingresados por COVID y se cree que seguirá así dos o tres semanas más.

Además, a pesar de la bajada “seguimos con unos números de contagio muy elevados” que rondan los 2.000 diarios. Así, el virus sigue circulando pero “se ve que las posibilidades por donde puede ir llegando se está acabando dada la inmensa cantidad de personas se han contagiado en esta onda”, ha explicado Wallmann.