Artículos de opinión de Javier Gallego, director del programa de radio Carne Cruda.
Accede aquí a nuestra portada.
10 años después del fin de ETA, lo que más se echa en falta es lo más difícil, que se asuman responsabilidades. La primera y más importante, la de ETA y el entorno social y político que dio cobertura a sus asesinatos, secuestros y extorsiones. Otegi y Sortu han dado un paso más al reconocer por separado el dolor causado a las víctimas de la banda terrorista y el error de una violencia que nunca debió suceder. Pero en esa frase faltó el sujeto del predicado: quiénes, en nombre de una idea, practicaron el terror contra el resto de la población o lo ampararon desde la complicidad. El terrorismo no fue un fenómeno meteorológico, fue la acción de un grupo de personas justificada por una parte de la sociedad vasca.
Son legítimas las ideas de independencia, autodeterminación, identidad, denuncia al Estado, pero no lo es segar, mutilar o coartar otras vidas para defenderlas. Esto lo ha asumido la izquierda abertzale mayoritariamente, pero aún no ha asumido su responsabilidad. Sí lo han hecho etarras arrepentidos que han pedido a los dirigentes del entorno de ETA que reconozcan su participación igual que exigen responsabilidades políticas del más alto nivel con los GAL. “No es lícito esconderse como topos y dejar todo el peso sobre los autores de los atentados”, han escrito.
Ni es coherente afirmar que sientes de corazón el dolor de las víctimas de ETA pero no condenar los homenajes a los victimarios. Ése es otro paso que una parte de la izquierda abertzale tiene que dar si quiere ayudar a curar la herida, como han pedido desde el terrorista arrepentido Urrusolo Sistiaga a la hermana de una víctima de los GAL, Pili Zabala. A las pocas horas de leer su comunicado, Otegi se reunió con sus afiliados en un acto en el que afirmó que votarán los Presupuestos del Gobierno si tienen que hacerlo para sacar a sus presos. Con sus muchos defectos y mal que pese a muchos, Otegi contribuyó a la pacificación. Pero si los presos son suyos, algún día tendrá que aceptar que los errores que cometieron, también.
Aunque sus votos no son imprescindibles para aprobar los PGE, le ha dado munición a la derecha española para decir que son los Presupuestos de ETA. No es que necesiten ayuda para utilizar el terrorismo y a sus víctimas, lo vienen haciendo desde hace décadas. El PP es responsable de haber usado electoralmente a los muertos, de haber instrumentalizado a las víctimas enfrentándolas y de haber estado a punto de descarrilar el proceso de paz, boicoteando las negociaciones y negándose a recoger las armas y certificar la defunción de la banda. Escribió Luis Aizpeolea que el centro derecha español “contra ETA vivía mejor” y hoy Mayor Oreja le ha vuelto a dar la razón cuando ha dicho que ETA está más presente que nunca, en Euskadi y en el Gobierno de España. Más quisiera.
Mayor Oreja era ministro de Interior cuando su gobierno indultó a tres guardias civiles condenados por torturar a un etarra. El actual ministro, Grande-Marlaska, cuando era juez desestimó hasta 6 casos de torturas que después han sido ratificados por el Tribunal de Estrasburgo. El bipartidismo y el aparato del Estado, de jueces a policías, tienen muchas responsabilidades que asumir en la represión, de los GAL a Intxaurrondo, de las condenas injustas, la persecución ideológica y el cierre de medios al alejamiento de presos, que no sólo son intolerables en un Estado de derecho sino que echaron gasolina al fuego de la violencia en Euskadi y prolongaron la vida de ETA.
Los papeles de los GAL siguen clasificados y este fin de semana Pedro Sánchez abrazaba a Felipe González en el Congreso del PSOE, otra muestra de lo lejos que están de admitir las aberraciones del Estado español en el conflicto. No tengo mucha esperanza en la valentía de los responsables que se esconden como topos, pero sí en que les empujen las personas valientes, víctimas, activistas y mediadores, que han trabajado y trabajan a contracorriente por la paz, la memoria, la justicia y la convivencia. Va por ellas. Haiengatik. Eskerrik asko eredu izateagatik.
Sobre este blog
Artículos de opinión de Javier Gallego, director del programa de radio Carne Cruda.
14