Noche tranquila en Navafría, estabilidad en Cebreros y pequeña reactivación en Monsagro

Los tres incendios que más preocupan en la Comunidad han tenido un comportamiento positivo durante la noche, con una pequeña reactivación en las Batuecas, en el caso de Monsagro (Salamanca) y sin crecer en Cebreros (Ávila).

Según informa la Junta a través de sus redes sociales, los fuegos en nivel 2 han sido “tranquilos”, sobre todo en Navafría (Segovia), ya que en el de Monsagro, donde las llamas han afectado ya a unas 9.000 hectáreas según estimaciones del Ejecutivo autonómico, se ha reactivado un foco en Batuecas.

Por su parte, en Cebreros (Ávila), donde ayer los servicios alertaban de su “propagación extraordinariamente rápida” y que, en esos momentos, era el incendio con “mayor actividad y potencial”, la meteorología ha permitido trabajar al Infocal, sin crecer su perímetro. No obstante, continúa activo y comienzan a incorporarse medios. El delegado territorial de la Junta en Ávila, José Francisco Hernández, ha manifestado que después de los trabajos de la noche en el incendio de Cebreros, su evolución es “altamente favorable” y sin llama en “buena parte del perímetro”.

Estos tres incendios forestales, son este domingo los más virulentos de la treintena de fuegos en los que ha intervenido en las últimas horas el Servicio de Extinción de Incendios de la Junta de Castilla y León.

De ellos, los dos de mayor nivel de peligrosidad son el de Monsagro, que ha calcinado 9.000 hectáreas y ha obligado a evacuar varias poblaciones, y el de Navafría, que ha cortado la carretera Nacional 110 y ha quemado un millar de hectáreas, mientras que el que ha presentado una peor evolución en la última jornada ha sido el de Cebreros, según fuentes de los medios de extinción.

A ese incendio de la provincia de Ávila se han incorporado a las ocho de la mañana de este domingo de nuevo los medios aéreos después de que durante la noche ha sido el que ha registrado un trabajo de los medios de extinción terrestres más intenso y peligroso de todos los focos de fuego de la Comunidad.

Junto a esos tres incendios, también existen otros cinco que requieren especial atención para el operativo de extinción de Castilla y León y por ello están declarados de nivel uno de gravedad en una escala ascendente que va de cero a tres.

Se trata de los incendios de Navalonguilla (Ávila), Paradaseca (León), Candelario (Salamanca) y los de las localidades zamoranas de Figueruela de Arriba y Roelos de Sayago.

Las temperaturas extremas, unidas a la baja humedad, la sequedad del terreno que favorece su combustión y las tormentas secas, han obligado a los medios de extinción a redoblar esfuerzos en las últimas jornadas.

Ejemplo de ello son los 165 incendios en los que ha intervenido la última semana el operativo de extinción de Castilla y León y los 35 a los que se ha enfrentado cada uno de los dos últimos días, tanto el viernes como el sábado.

Este domingo se espera que la situación movilice igualmente a todos los medios disponibles en la Comunidad con refuerzos como los de la UME y medios estatales, ya que las condiciones climáticas no han cambiado y hay una simultaneidad de fuegos que agrava aún más la situación.