Aena contempla que la Guardia Civil se encargue de la seguridad del Prat si sigue la huelga
Mientras los trabajadores de la seguridad privada de Eulen en El Prat se encuentran reunidos en asamblea para decidir si aceptan o no el preacuerdo propuesto por la Generalitat y aceptado por el resto de las partes, Aena ya ha enseñado la que podría ser una de las cartas si la huelga va a peor: que la Guardia Civil sustituya a los trabajadores.
La fuerza policial benemérita es consciente de la posibilidad de que esto ocurra, según informó la agencia ACN este jueves, y ya baría reforzado su plantilla en el aeropuerto barcelonés en las últimas semanas. De facto se trataría de una militarización encubierta, aprovechando que la Guardia Civil ya tiene la competencia de la seguridad aérea. Tanto es así que, según han recordado fuentes de la compañía, Eulen y el resto de empresas de seguridad privada en los filtros de pasajeros trabajan bajo la supervisión de los agentes.
La opción de sustituir la seguridad privada por la Guardia Civil se contempla solo en el caso de que la huelga genere un caos que, por el momento, no ha ocurrido en El Prat, donde se han vivido colas de has una hora pero paros completos de la actividad. Esto podría cambiar, sin embargo, el próximo día 14 de agosto, cuando los trabajadores de Eulen tienen convocada una huelga permanente ni su conflicto no se ha resuelto. En cualquier caso, la decisión de que la Guardia Civil tome el control de los filtros deberá ser tomada por el Ministro del Interior.
Antes de llegar a eso, las partes en el conflicto laboral, así como la Generalitat como intermediadora, esperan que haya una resolución satisfactoria este mismo jueves, con la aceptación de los trabajadores del preacuerdo del pasado martes. En él se estipulaba un aumento de 200 euros para los sueldos más bajos, y aumentos lineales para los que cobran más, hasta igualarlos todos. También la contratación de nuevo personal, para disponer un quinto vigilante por filtro y de una bolsa de 25 relevos.
Eulen aceptó estas reclamaciones y Aena se comprometió a garantizarlas en futuras licitaciones, pero el Comité de empresa consideró que podrían ser insuficientes para los trabajadores, aunque decidió someterlas a votación. La carta de la Guardia Civil, enseñada ahora por parte de la empresa, viene a poner presión a la decisión de los huelguistas, que deberán pronunciarse con tiempo suficiente para desconvocar o mantener los paros de este viernes.