La oposición reclama a Colau que concrete las políticas de su plan contra la desigualdad
Ocho meses después de llegar a la alcaldía de Barcelona, Ada Colau se ha sometido este viernes a su primer pleno de estado de la ciudad para pasar revista a su proyecto de gobierno. “La Barcelona de hoy es más desigual que la de hace 8 años”, ha dicho Colau para enmarcar su propuesta. En las últimas semanas, los de Barcelona en Comú han presentado su proyecto de mandato con dos ejes. Por un lado, un proyecto de plan de barrios con un horizonte de 10 años para reducir las crecientes desigualdades entre barrios, por la otra, la propuesta de Programa de Actuación Municipal (PAM) que debería aprobar el plenario para concretar este plan. La oposición, sin embargo, no está satisfecha y ha coincidido en reprocharle a la alcaldesa la falta de concreción de sus medidas.
Después de presentar su proyecto para abordar las desigualdades en la ciudad, Colau ha interpelado a “aquellas formaciones con las que en los plenos y en las cuestiones importantes hemos demostrado que tenemos más acuerdos que desacuerdos” para lograr estabilidad en la aplicación de su programa de gobierno, dado que cuenta con sólo 11 concejales. Los principales candidatos, Esquerra y PSC, han puesto deberes a la alcaldesa. “La ciudad de Barcelona no está mucho peor que hace ocho meses, tampoco está mucho mejor que hace ocho meses, y también es cierto que ocho meses no dan para un cambio profundo, pero esperamos el cambio”, ha dicho Alfred Bosch. El republicano ha reclamado a Colau un “new deal”. “El cambio pasa por tener proyecto, y es en la concreción donde nos podrán convencer”, ha apuntado.
El líder del PSC, Jaume Collboni, ha vuelto a ofrecerse para entrar a formar parte de un gobierno de izquierdas, pero ha coincidido con Bosch en decir que en “estos ocho meses se han producido demasiados anuncios y demasiado poca concreción”. El líder socialista ha reivindicado la tradición de su partido en la ciudad, y ha asegurado que “los mejores años de esta ciudad han sido fruto de liderazgo de alcaldes con ideas claras, gobiernos de progreso y pactos de ciudad”, tres elementos que reclama a Colau. En cambio ha sido especialmente crítico –como también lo han sido los otros grupos municipales– con la presentación este jueves del PAM, un día antes del pleno y sin conversaciones previas con los grupos. “Hoy estamos un poco más lejos del acuerdo que antes de ayer”, ha declarado Collboni.
A pesar de ser uno de esos grupos con los que coinciden con muchas cosas, la CUP no tiene ninguna intención de entrar en el gobierno de Colau, y su representante, María José Lecha, llevan en la crítica al gobierno de Colau. “Ocho meses después, aparte de gestos y algunas mejoras sociales, este ayuntamiento no ha roto con el modelo de política municipal”, ha criticado Lecha. En alusión de la presentación del PAM el jueves y el poco tiempo para maniobrar, la portavoz anticapitalista ha asegurado que “la institución está pensada para que las decisiones las tomen muy pocas personas”, y ha valorado que el gobierno de Colau no está trabajando para romper este modelo.
En respuesta a las fuerzas de izquierdas, Colau ha defendido el trabajo hecho. “Dicen que no concretamos, pero nada más llegar al gobierno no hemos parado de presentar medidas de choque”, ha reivindicado la alcaldesa. “Evidentemente siempre hay que hacer más, pero pediría un poco de comprensión, llevamos siete meses en el gobierno y hay cuestiones que dependen de otras administraciones”, ha dicho en alusión a la conocida como ley Montoro, que limita la capacidad de contratación del ayuntamiento.
CiU busca acuerdos amplios de ciudad
En el lado derecho del plenario, ha sido el líder de CiU Xavier Trias quien más ha reclamado participar en los acuerdos de ciudad. “Las cosas sólo irán bien si somos capaces entre todos, no sólo entre unos cuantos, los más afines, de hacer avanzar nuestra ciudad”, ha dicho el exalcalde, que ha reivindicado una trayectoria pactista: “con gobiernos socialistas he pactado muchas medidas a medio y largo plazo siendo jefe de la oposición”. No obstante, el trabajo de los socialistas ha sido también muy criticado en su intervención. Trias ha querido defender su mandato y dirigir las críticas hacia los gobiernos anteriores: “durante los años de máxima crisis económica, de 2008 a 2011, no se hicieron las inversiones en gasto social que se tenían que hacer”.
Mientras Trias criticaba la falta de la participación anunciada por Colau, la líder de Ciutadans Carina Mejías criticaba precisamente el exceso de ésta. “A día de hoy hay más de 20 procesos participativos de los que dependen las decisiones importantes de la ciudad, cuando la democracia participativa hace que los grupos municipales estemos capacitados para tomar decisiones”, ha reivindicado Mejías.“Ustedes no tienen una visión muy clara de la ciudad, y como no la tienen toman decisiones alocadas que se oponen a años de progreso”, ha explotado a Colau.
El líder del PP Alberto Fernández Díaz ha optado por retratar una Barcelona del caos donde “los okupas campan a sus anchas”. Ha criticado a Colau sobrepasarse con los gestos mientras “las órdenes del día de los consejos plenarios están vacíos de cuestiones de gobierno” y, en la línea que mantiene desde la campaña electoral, ha reprochado a la alcaldesa las políticas llevadas a cabo por ICV antes de la creación de Barcelona en Comú.